En abril de este año se realizó el lanzamiento oficial de la aplicación YO, controversial desde sus inicios. La única funcionalidad de YO, disponible para plataformas Android y iphone, es enviar el mensaje YO a tus contactos, nada más y nada menos. De acuerdo a Wikipedia, el ejecutivo Moshe Hogeg le habría pedido a su amigo israelí Or Arbel que diseñara una aplicación directa para poder avisarle a su asistente que la necesitaba, ante el fracaso de los llamados vía correo electrónico y SMS.
Arbel tardó 8 horas en diseñar la aplicación y Hogeg quedó tan satisfecho que decidió convencer a un grupo de inversionistas que aportara un millón de dólares para darle forma al proyecto. Las críticas no se hicieron esperar. Especialistas de diversos países han calificado la aplicación de insustancial y se quejan amargamente de la falta de tino de los inversionistas, que deberían estar destinando fondos a otros proyectos con más potencial.
Homepage de la aplicación YO.
Desde su lanzamiento, la aplicación YO ha sido descargada por más de 2 millones de personas y se reportan picos de hasta 4 millones de YOs por día.
De acuerdo a Wikipedia, Arbel habría decidido renunciar a su cargo como jefe de tecnología de la empresa Stox, para dedicarse a tiempo completo a YO, con un equipo inicial de 4 personas. Para julio, el valor de la aplicación se estimó entre 5 y 10 millones de dólares y nuevos inversionistas habrían aportado otro millón y medio de dólares al proyecto.
La semana pasada los creadores de YO realizaron el lanzamiento de YO lineup, una aplicación sin costo mediante la cual un restaurante puede ordenar la cola de comensales, avisando por esta vía cuando se desocupa una mesa. YO ahorraría a los restaurantes los aparatos que hoy en día están de moda para notificar a los clientes en espera. Un odontólogo en Florida escuchó sobre la idea y quiere aplicarla en su consultorio, para avisar a sus clientes cuando les toca el turno. En Israel una comunidad de usuarios usa el sistema desde hace un par de meses para recibir avisos sobre ataques misilísticos.
La comunidad de desarrolladores de aplicaciones ha sido implacable en su crítica a YO, desarrollando clones para burlarse del concepto y también ha habido episodios de hackeo a la aplicación. Sin embargo, los creadores de YO claman que están desarrollando un nuevo concepto de mensajería basada en el contexto.
La pregunta que nos queda por hacer: ¿Es viable YO como emprendimiento o idea?
Tomando en cuenta que tres de cada cuatro empresas nuevas fracasan en su objetivo de redituar el financiamiento aportado para su puesta en marcha, asomamos 5 interrogantes que deben realizarse cuando nos hallamos ante una idea o proyecto potencial de este tipo:
¿Cuáles son los objetivos de este emprendimiento?
¿Cuál es el valor agregado de este nuevo concepto?
¿Quiénes son sus competidores?
¿Es posible convertir esta idea en una marca, claramente diferenciada?
¿Es monetizable esta iniciativa?
¿Invertiría usted en YO?
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