Las enfermedades cardiovasculares representan la primera causa de muerte a nivel mundial, por esta razón es importante hacer un llamado a la prevención y diagnóstico temprano de estos padecimientos, como las cardiopatías coronarias (ataques cardiacos), las enfermedades cerebrovasculares (apoplejía), el aumento de la tensión arterial (hipertensión), las vasculopatías periféricas, las cardiopatías reumáticas, las cardiopatías congénitas y la insuficiencia cardiaca.
Entre las ECV más frecuentes en Venezuela, la hipertensión arterial (HTA) se posiciona como la de mayor prevalencia, ya que aproximadamente 34 de cada 100 venezolanos son hipertensos, así lo indicó el Dr. Roberto López Nouel, cardiólogo y jefe del Departamento de Medicina del Centro Médico Docente la Trinidad.
La HTA es una elevación anormal de la presión en las arterias, debido a múltiples factores y sistemas involucrados. “Es la principal morbilidad cardiovascular que hay en el mundo. Unos 7 millones de personas mueren al año prematuramente por esta enfermedad y se estima que para el año 2025 el número de personas hipertensas aumente un 30%, principalmente en los países no desarrollados y en forma particular en los países del Caribe. En Venezuela, la prevalencia de esta patología según estudios muy recientes está entre un 34% y 35%, siendo más alta en las mujeres”, afirmó el especialista.
López Nouel explica que el problema de esta patología es: “En primer lugar que no produce síntomas, por lo que muchos de los hipertensos no son diagnosticados a tiempo y, por falta de tratamiento pueden llegar a sufrir infartos o ictus (comunmente conocidos como accidentes cerebrovasculares o ACV), entre otras complicaciones. En segundo lugar tenemos la incapacidad que se produce, posterior a un ictus; 29% de los afectados necesita ayuda para comer, 87% para vestirse y 93% es dependiente para ir al baño”.
Es importante mencionar que en muchos casos la HTA puede llevar al desarrollo de una insuficiencia cardiaca (incapacidad por parte del corazón de cumplir con la demanda metabólica del organismo, es decir cuando no puede bombear la cantidad de sangre necesaria al cuerpo), tal como lo comenta el Dr. Carlos Ponte, médico cardiólogo e internista del Hospital Dr. Domingo Luciani.
El Dr. Ponte indica que algunas de sus causas, además de la HTA, pueden ser el tabaquismo, el sedentarismo y una dieta alta en sal y grasas. Puede sufrirla cualquier persona sin importar la edad, pero es más frecuente en adultos mayores de 50 años. Los síntomas de esta enfermedad son cansancio y debilidad y, en casos más graves, somnolencia, confusión y desorientación. Entre sus consecuencias se encuentran fallas en la función pulmonar y renal, esto produce dificultades para respirar y eliminar el exceso de líquido de la sangre, respectivamente.
Los betabloqueantes constituyen una de las cinco clases de medicamentos existentes para el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares, y son considerados de gran utilidad, en particular para el control de la HTA y la insuficiencia cardíaca. Como su nombre lo dice, bloquean los receptores que producen una estimulación excesiva del corazón (catecolaminas) y vasos sanguíneos. “En la actualidad existe una nueva generación de este tipo de fármaco que actúa no sólo como bloqueador de estos receptores sino como vasodilatador, no influyendo en el metabolismo del paciente, entre ellos el carvedilol”, asevera el Dr. López Nouel.
Por su parte el Dr. Ponte comenta que entre los beneficios de esta terapia se encuentra el control de la presión arterial, reducción de la frecuencia cardíaca y, como resultado, la mejora del trabajo del corazón. El tratamiento con esta molécula es seguro en personas con diabetes, enfermedades coronarias, insuficiencia renal y particularmente favorable en personas con insuficiencia cardíaca con baja fracción de eyección (cantidad de sangre que bombea el corazón a través del ventrículo izquierdo).
Un llamado a la prevención
Debido al alto índice de personas con estas patologías, los especialistas hacen un llamado a prevenir las enfermedades cardiovasculares, principalmente la HTA. Para esto es importante que todas las personas se tomen la tensión al menos una vez al mes, a fin de conocer las condiciones normales de los niveles de tensión necesarios para el bombeo de la sangre desde corazón, y saber identificar cuándo se está en presencia de una situación irregular. Además, adoptar un estilo de vida sano, siguiendo una dieta balanceada y evitando el sedentarismo.