El ex jugador brasileño Ronaldo calificó este domingo de “desastroso” el comentario público de Pelé, quien dijo que no había que prestar tanta atención a los gritos racistas en la cancha, tras la expulsión del Gremio de la Copa de Brasil por los insultos de su hinchada.
“Encontré desastroso [el comentario de Pelé]. Si una persona sufre un acto de racismo, tiene que denunciar. Tiene que hacer valer sus derechos como ciudadano”, afirmó Ronaldo a los medios locales durante un evento electoral en el que acompañó al candidato socialdemócrata a las presidenciales, Aécio Neves.
“Todo el mundo debe estar en contra de cualquier acto de racismo. La gente tiene que tomar conciencia de que es un sentimiento muy antiguo y atrasado. La gente debe ser castigada por los crímenes que comete”, zanjó el campeón del Mundo en 1994 y 2002, quien ha prestado su apoyo abiertamente al candidato del PSDB, tercero en la carrera electoral.
Preguntado este miércoles sobre su opinión respecto al castigo al Gremio por los insultos de un grupo de hinchas al portero del Santos, Aranha, Pelé se mostró tibio.
“Aranha se precipitó un poco al querer pelear con la hinchada. Si yo hubiera tenido que parar cada partido en el que me gritaron ‘mono’ o ‘criollo’, tendrían que detenerse todos los juegos. El aficionado, dentro de la rivalidad, grita. Creo que tenemos que impedir el racismo, pero no se va a erradicar en un lugar público. […] Cuánta más atención se le dé a esto, más va a empeorar”, opinó Pelé el miércoles.
Hace apenas diez días, el tribunal brasileño de Justicia Deportiva (TSJD) tomó una decisión inédita en el fútbol latinoamericano y decretó la eliminación del Gremio de la Copa de Brasil por los insultos racistas de un grupo de hinchas gaúchos al portero del Santos.
La imagen de una joven de 23 años gritando “macaco” [mono, en español] desde la tribuna fue entonces repetida una y otra vez en la televisión brasileña.
La muchacha, identificada como Patricia Moreira, fue llamada a declarar a la policía, despedida de su trabajo y, desde entonces, es blanco de insultos y amenazas a través de las redes sociales.
Este viernes, la casa de Moreira en Porto Alegre (sur) fue atacada y sufrió un leve incendio cuando nadie se encontraba en el interior. AFP