Una nueva estatua de Lenin fue derribada hoy en la región ucraniana de Járkov (este), donde las autoridades han desplegado blindados ante el temor a un estallido de enfrentamientos entre partidarios y detractores del fundador de la Unión Soviética.
Según informó la policía local, unos desconocidos derribaron la parte superior del monumento a Lenin erigido frente a una fábrica en la ciudad de Izium, situada a escasos kilómetros de la frontera con la región de Donetsk, escenario de una sublevación prorrusa contra Kiev.
Éste ha sido el tercer caso de derribo de una estatua del fundador de la desaparecida URSS en esta región, escenario en abril pasado de manifestaciones contra Kiev, pero que se mantuvo al margen del levantamiento contra el Gobierno central.
Por ese motivo, blindados de la Guardia Nacional ucraniana patrullan hoy Járkov, la mayor ciudad del este rusohablante y la capital de la región homónima fronteriza con Rusia.
Un grupo de hinchas de fútbol radicales dispersó anoche una manifestación organizada por simpatizantes comunistas que exigían la restitución de la estatua de Lenin en la plaza central, considerada la mayor del país y de Europa y que fue derribada el domingo.
Poco después, el gobernador de la región de Járkov designado por Kiev, Ígor Baluta, ordenó el desmantelamiento de la estatua, evitando así que los responsables del acto vandálico fueran procesados por la Justicia.
Sin embargo, el alcalde de la ciudad, Guennadi Kernés, calificó de ilegal tanto el derribo de la estatua como la decisión del gobernador.
Desde el inicio, a finales de 2013, de las protestas contra el derrocado presidente ucraniano Víktor Yanukóvich, han sido decenas las estatuas y bustos de Lenin derribadas en todo el país.
La primera y más simbólica fue una estatua derribada en diciembre en pleno centro de Kiev, muy cerca de la emblemática plaza de la Independencia (Maidán).EFE