Andaba jugando y corriendo, pero se cayó en un tanque de los azules repleto de agua que estaba sin tapa y enterrado en el patio de su casa, ahogándose en pocos minutos.
Era un bebé, gemelo, que cumpliría cuatro años en el mes de diciembre. El lamentable hecho ocurrió en la comunidad La Independencia del sector El Portachuelo, al norte de Barquisimeto.
Sus familiares comentan que el suceso ocurrió “en un santiamén” y cuando se dieron cuenta, ya era demasiado tarde.
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