Por lo menos 51 personas fueron detenidas hoy en Brasil acusadas de participar en una red de divulgación y almacenamiento de imágenes de abuso sexual infantil, en una gran operación que incluye investigaciones en Venezuela, México, Colombia, Italia y Portugal.
La Policía identificó a 106 sospechosos, en su mayoría en Brasil y el resto en los otros cinco países, según anunciaron responsables de la operación en una rueda de prensa en Porto Alegre, capital de Río Grande do Sul, estado más meridional del país.
Entre los detenidos brasileños se encuentra un seminarista, un agente penitenciario y un funcionario que trabaja en instituciones de seguridad pública, según detallaron los responsables de la operación.
La comisaria Diana Calasanz, de la Policía Federal, afirmó que, a lo largo de la investigación, las autoridades identificaron personas “de los más variados perfiles, de diferentes clases sociales y profesiones”.
“No existe un perfil del criminal. Como es un crimen muy oculto cualquier persona puede ser el perpetrador”, dijo la comisaria en la rueda de prensa.
Un portavoz de la Policía Federal brasileña informó a Efe que los sospechosos usaban un programa informático llamado “deep web”, un espacio en la red de altísima privacidad donde se intercambiaban vídeos de pederastia.
Unos 500 policías federales de Brasil participaron en la Operación Darknet en los estados de Amazonas, Amapá, Bahía, Ceará, Espíritu Santo, Goiás, Minas Gerais, Pará, Pernambuco, Piauí, Paraná, Río de Janeiro, Río Grande do Norte, Río Grande do Sul, Rondonia, Santa Catarina, Sao Paulo, Mato Grosso do Sul y Brasilia.
Las operaciones de búsqueda y captura tenían como objetivo buscar archivos en ordenadores y otros equipamientos informáticos de los sospechosos.
“La policía brasileña logró penetrar en el programa de alta seguridad ‘deep web’ en algo que apenas lo han hecho el FBI y la policía británica”, dijo el portavoz de la oficina de prensa de la Policía Federal.
El programa de alta seguridad, que evita la identificación del punto de acceso (IP), es usado por ejemplo, según el portavoz, por el exespía estadounidense Edward Snowden para revelar documentación de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de Estados Unidos.
La investigación comenzó hace un año y permitió, según la policía, rescatar a seis niños en situación de abuso en diversos lugares de Brasil.
Según un comunicado de la Policía Federal del estado de Río Grande do Sul, los estudios indican que entre los hombres detenidos por posesión y distribución de contenido de abuso sexual infantil, el 85 % admite que tuvo contacto sexual con menores.
EFE