Cuba y un bloque de países aliados de la región aprobaron el lunes un plan de acción para impedir la propagación del ébola y ayudar a África Occidental a combatir el virus que, según el presidente cubano Raúl Castro, podría generar una de las pandemias “más graves de la historia”.
Siete presidentes o primeros ministros de la Alianza Bolivariana Para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) participaron en el encuentro, en el que también estuvo presente la Organización Mundial de la Salud y un representante de las Naciones Unidas.
“Tengo la convicción de que si esta amenaza no se frena y resuelve en África Occidental, con una respuesta internacional inmediata, eficaz y con recursos suficientes (…) puede convertirse en una de las pandemias más graves de la historia de la humanidad”, dijo Castro al inaugurar la reunión.
Más de 4.500 personas han fallecido debido al virus del ébola desde que surgió el brote en marzo en Guinea y se extendió posteriormente a Liberia y Sierra Leona, en lo que se considera el peor de la historia.
“Acordamos coordinar nuestros esfuerzos para prevenir y enfrentar la epidemia del Ébola, incluida la rápida prestación y utilización de la asistencia entre nuestros países, con trabajadores sanitarios y los suministros y materiales pertinentes”, señaló la declaración final del encuentro.
Los países del ALBA se comprometieron además a dar atención prioritaria a naciones del Caribe con pocos recursos económicos como Haití para luchar contra el ébola y a reforzar las medidas de vigilancia epidemiológica en las fronteras, en particular en puertos y aeropuertos.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, propuso al plenario la solicitud “inmediata” a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que encabeza Costa Rica, de una reunión con las más altas autoridades de salud para evitar la propagación del virus.
“La respuesta del ALBA tiene que ser preventiva”, dijo Maduro, en la apertura del foro. “Creo que hemos reaccionado a tiempo”, agregó.
Castro, por su parte, reiteró la disposición de Cuba de dejar de lado los 55 años de tensiones políticas con su enemigo político Estados Unidos y trabajar de manera conjunta para combatir el ébola.
“Cuba está dispuesta a trabajar codo con codo, con todos los países, incluyendo los Estados Unidos”, señaló.
Estados Unidos está enviando unos 3.000 ingenieros militares, personal médico y otras tropas a las naciones africanas.
Ningún caso de ébola ha sido reportado en América Latina y el Caribe, pero el virus ha llegado a Estados Unidos y España.
La cumbre de La Habana reunió a los presidentes de Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Haití -país que asiste como invitado-. También participan los primeros ministros de Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas, junto a representantes de Ecuador, Dominica, Antigua y Barbuda.
Cuba fue uno de los primeros países en enviar una brigada sanitaria de 165 profesionales de la salud a Sierra Leona para combatir el ébola. Otros 296 médicos y enfermeros viajarán el martes desde La Habana como parte de un segundo y tercer contingente que laborará en Liberia y Guinea. Reuters