La decana del núcleo Bolívar de la Universidad de Oriente (UDO), María Coromoto Casado, informó que el Consejo de Núcleo decidió designar una comisión para investigar los recientes robos y daños en las instalaciones universitarias, y abrir un expediente a los responsables de la toma de la sede del decanato y de otras instalaciones universitarias.
La autoridad universitaria explicó que se analizó la situación del núcleo, que entró en crisis por las cinco semanas de cierre del decanato, y que ha generado consecuencias adversas para la universidad.
Casado señaló que la comisión investigará los últimos hechos de hurto registrados contra las sedes de Cursos Básicos, Ciencias de La Tierra, Delegación de Deporte y departamento de Salud Pública, “áreas que se encontraban cerradas por los estudiantes afectos a las tomas”.
Instó a la comunidad udista a defender el semestre que no ha podido comenzar como estaba programado, debido al cierre de algunas de sus sedes, y que pone en riesgo los compromisos que el núcleo mantiene con proveedores para mantener activos los servicios.
En voz del delegado de Deportes del núcleo, Jesús Suárez, se expuso lo grave de la situación que coloca en peligro las becas deportivas, y la participación de atletas en los Juegos Nacionales Universitarios (Juvineu).
“Los estudiantes debían formalizar sus inscripciones con sus soportes hasta el pasado miércoles 22, y a pesar que la Federación Venezolana de Deportes concedió una prórroga hasta el pasado 24 de octubre para consignar los récords académicos y constancias de estudios, no se pudieron entregar por la toma del decanato”, dijo.
La no participación de esta delegación en estos juegos genera la pérdida de las becas deportivas, que se asignan de acuerdo a los resultados logrados por los atletas.