Emilio Rentería sigue viviendo una temporada de ensueño en Chile, es que desde su llegada al San Marcos de Arica se ha ganado el respeto de sus compañeros y la confianza del cuerpo técnico del cuadro chileno gracias a sus actuaciones en cada jornada del Torneo Apertura del país sureño.
Sus números lo demuestran, y este viernes agregó más minutos y gol a sus cuentas personales. Es que el delantero criollo, que está convocado para disputar los amistosos de Venezuela frente a Chile y Bolivia, vacunó al O’Higgins con su tercer gol en el torneo local, pero que al final no alcanzó para que el San Marcos gritará victoria.
Noche amarga para el equipo de Arica, que sufrió una remontada en los últimos minutos para llevarse la derrota, y también de desconsuelo para Rentería por culpa de un virus que se ha propagado por todas las canchas del balompié mundial: el racismo.
Es que el corpulento artillero sufrió canticos racistas por parte de la barra del O’Higgins en el comienzo de la segunda parte, que obligó al árbitro principal del encuentro a detener el partido momentáneamente por el bochornoso acto que duró 60 segundos.
Otro episodio amargo para el mundo del fútbol por un veneno que al parecer no tiene cura, y que su nueva víctima fue un hermano venezolano, que apunta de goles y de buenas actuaciones ha dejando el nombre del país bien en alto en toda Chile.
Vía Meridiano