Nicole Bicknell, una joven de 18 años residente en Australia, murió hace dos semanas después de haber ingerido varios chupitos de vodka Polmos Spirytus Rektyfikowany. Según afirman varios medios internaciones como el «Daily Mail», todo ocurrió el día de su cumpleaños durante una fiesta con sus amigos, publica abc.es.
Al parecer, la jornada comenzó de una forma normal para Nicole, que tomó varias bebidas alcohólicas mezcladas con todo tipo de refrescos sin sentir malestar. Sin embargo, todo cambió cuando le ofrecieron ingerir Polmos Spirytus Rektyfikowany –una bebida con un 95% de alcohol-. Tras tomarse varios chupitos de este licor, cayó redonda al suelo sin conocimiento y, finalmente, murió.
Tras el suceso, la fundación australiana contra las drogas ha criticado duramente a la bebida por no contar con una etiqueta que informe de su alta graduación. «No hay ninguna advertencia en la botella, pero hay una advertencia en el jarabe para la tos que te dice que no debes beberlo antes de conducir maquinaria pesada porque tiene alcohol», ha señalado uno de sus representantes en el periódico británico.