Falta poco para cerrar el año 2014 y muchas son las aspiraciones de los maracayeros para lograr superar los obstáculos y tener un próspero 2015. En retrospectivas muchos califican de positivo este ciclo y otros no tanto, pues llegan a calificar el año como el año de las colas y la deficiencia en muchos aspectos así como de los servicios.
Así se pudo constatar en un sondeo realizado en la ciudad, donde más allá de establecer una opinión, manteniendo al margen la política o haciendo el intento, el común denominador fue desbordarse hablando de lo malo, mientras que por lo positivo, los ciudadanos manifestaron que por lo que pueden agradecer es por la salud y la vida.
En ese sentido, se hace evidente el descontento y por la situación que enfrentan día a día los venezolanos para cubrir sus necesidades básicas. Sea o no parte de una “guerra económica” los consultados refirieron que resulta preocupante como la mayoría de las familias venezolanas tienen que hacer “maromas” en la actualidad para adquirir los productos de la cesta básica, medicinas, repuestos, entre otros, convirtiéndose las colas en parte de su día a día.
Manuel Magill, agradece primeramente a Dios por estar vivo, a la par que opina que se debe tomar conciencia en el sentido que se tiene una economía muy debilitada lo que deja a la sociedad sufriendo por la falta de respeto y de amor para atender los problemas.
“Esperamos que este año nuevo por venir, venga con mucho amor para que los venezolanos nos amemos y no nos matemos porque de seguir así la situación será bastante difícil”, consideró.
Dámaso Salinas, puntualizó que el alza constante de los precios ha sido lo que ha golpeado más la economía de los venezolanos, pues las cosas aumentaron en reiteradas oportunidades, además del desabastecimiento, el desempleo, la baja producción y alza de los precios. Mientras que lo que puede considerar positivo es la atención que ha tenido las personas de la tercera edad con el pago de las pensiones. “Esperemos que al menos podamos conseguir las cosas, principalmente algo tan vital como la comida porque actualmente no se consigue nada si no es con una cola. En esas nos la hemos pasado todo el año”.
Por su parte, Miguel Alcalá consideró que el tener salud y vida es ganancia al tiempo que afirmaba que lo negativo es las colas que se arman para todo, incluso hasta para la gasolina, pues este año ni los conductores se salvaron de esta situación.
“Las colas se han prestado para todo, hasta para los tramperos que han hecho de las suyas hasta ofreciendo cupos. Ojalá que no, pero creo que tenemos que ponernos los pantalones bien puestos porque la cosa está fea. Ya las navidades no son las mismas, de hecho ahorita hasta los estrenos están difícil y cuando mucho para los niños y la cena, pan con jamón y queso”, dijo.
“Cola para todo. Tenemos que llenarnos de optimismo y seguir adelante porque si se sigue así va a llegar un momento en que se vendrán matando las personas por la necesidad de conseguir las cosas, porque tampoco se hace nada con tener el dinero y no conseguir las cosas”, dijo Boris Marín.
Yuleima Quintana dijo que “las colas que se han presentado para todo ha sido horrible para el país en general. A veces también por la inconciencia de muchas personas, especialmente los revendedores. Lo de comprar sin hacerlas es eventual y lo que quisiéramos porque incluso ya se ha tornado hasta peligroso, porque los malandros aprovechan de hacer de las suyas como hemos escuchado que ha pasado en algunos establecimientos. Y es que para todo es cola, hasta para los bancos es un colón. Lo que puede ser positivo para mi, son mis hijos y la salud. Esperamos que en el 2015 todo vuelva a la normalidad y podamos conseguir las cosas como antes”.
Isabel Reverón consideró que “esto es horroroso. Ya uno no puede ni tener ahorro porque tiene que sacar el dinero del banco y tenerlo en la mano porque uno no sabe si va a conseguir algo de lo que escasea en un sitio. Es bastante fuerte y terrible esta situación, de verdad. Venezuela es muy bonita, pero la política es lo que ha llevado a esta situación. Lastimosamente no estamos preparados para enero porque como va el precio del petróleo es un indicio de la situación en la que estamos y no hay que ser un especialista en la materia para saber que vamos mal. Pero por nuestra juventud y nuestros niños es que tenemos que trabajar y trabajar para salir adelante”.
Entretanto, como la esperanza es lo último que se pierde, los deseos para los próximos 365 días del 2015 es que se depongan los enfrentamientos políticos entre un bando y el otro, en un país notoriamente polarizado, y que se trabaje por devolverle a los venezolanos la tranquilidad de no preocuparse por la escasez, el sobreprecio y/o la especulación.
Vía El Siglo