Nivea Cabrera pasó un momento embarazoso en Navidad cuando la madre de su prometido la acusó de prestar un juguete sexual a su nieta de 5 años.
Cabrera, mortificada, preguntó a la niña donde había conseguido ese cilindro de plástico en forma de pene.
“Es de mi Play-Doh”, respondió la pequeña.
La compañía Hasbro, con sede en Pawtucket, se ha comprometido a cambiar esa herramienta extrusora por otra con forma distinta para el juguete Cake Mountain de pasta para modelar.
La herramienta de dos piezas parecida a una jeringa tiene soportes para los dedos tipo sacacorchos en un extremo, y en el otro tiene forma de domo con un hoyo en la punta. Puede utilizársele para poner pasta de modelar como si fuera merengue decorativo de pastel.
Las quejas aparecieron desde cuando menos noviembre, cuando la televisora KTUL, de Tulsa, Oklahoma, mostró la herramienta a los padres y les preguntó cuál era su opinión.
La televisora difundió la imagen borrosa de la herramienta durante el programa y afirmó que se debió a las reacciones de los padres.
Una mujer dijo a la estación que era “una pieza con forma bastante fálica para la decoración de pasteles”.
Después de Navidad, comenzaron a llegar comentarios a la página de Facebook de Play-Doh, incluido el de Cabrera, residente de Lancaster, Pennsylvania.
Cabrera dijo que Hasbro le llamó por teléfono después de que ella difundiera el día de Navidad una foto de la herramienta y preguntara sobre la forma que tenía. Dijo que la compañía ofreció enviarle una extrusora de reemplazo con forma distinta, la cual no ha recibido, reseña AP.
“Estamos en el proceso de actualizar todos los productos futuros de Play-Doh con una herramienta distinta”, dijo Hasbro en un comunicado publicado el martes en la página de Play-Doh en Facebook.
También ofreció remplazar la herramienta para todo aquel que tenga quejas.
Erin Rivers, madre de dos menores en Melbourne, Florida, dijo que le causó gracia la herramienta cuando ayudó a su hija de seis años a abrir la caja.
“Saqué la herramienta extrusora, y me ganó la risa, no pude evitarlo. Puse inmediatamente la masa para modelar dentro y le saque una foto”, agregó.
“Hay una persona que la crea, alguien que hace el molde de plástico, alguien que juega con ella”, dijo. “No me puedo imaginar que de tantas personas que quizá hayan visto el juguete, ninguna dijera: ‘¿No creen que parece un pene’?”