Aurelio Enrique Rodríguez González, de 18 años, recibió un disparo cuando celebraba el Año Nuevo con unos amigos en el barrio Etnia Wayuu, parroquia Ildefonso Vázquez, del norte de Maracaibo. Unos amigos lo llevaron al Hospital Universitario de Maracaibo, donde falleció a las 7.15 de la noche del pasado jueves antes de ser trasladado a pabellón para una operación de emergencia. Así lo publica laverdad.com / José Manuel Sánchez
Aurelio Rodríguez, padre del occiso, explicó que al parecer su hijo sostuvo una acalorada discusión con otro hombre la tarde del jueves, pero el problema no pasó más allá de unos dimes y diretes entre ambos.“Me dijeron que el otro muchacho se fue a su casa por un arma y encontró a mi hijo reunido con los amigos. Sin decirle nada le disparó en una oportunidad”. Indicó que los acompañantes del baleado lo montaron en un carro y lo llevaron al centro asistencial.
La comunidad acusa al “Culis” como autor material del crimen, lo acompañaban el “Patico” y el “Román”, todos se dedican al robo y hurto en el barrio Las Tuberías. Según los testigos, Rodríguez les exigió que le regresaran la batería de su motocicleta, la cual desapareció el 20 de diciembre de 2014.
Careo
El jueves, Rodríguez salió de su casa para pasar un buen rato con sus amigos de la infancia. En el camino se topó con el “Culis”, a quien reconoció como el culpable del robo. Sin pensarlo dos veces lo acusó directamente delante de todos los vecinos. Esto ocasionó que el criminal se enfadara y en vez de enfrentar a su acusador corrió a la casa de sus compinches por un arma. Al llegar al sitio, donde minutos antes hubo la discusión, no encontró al muchacho.
“Culis”, “Patico” y “Román” caminaron un par de cuadras y vieron al grupo. Rodríguez se percató de que el ladrón estaba tras él, pero igual lo quiso confrontar. A la 6.45 de la tarde la detonación acabó con las fiestas de la cuadra. Para cuando los vecinos salieron encontraron a la víctima malherida en el medio de la calle. Los amigos llamaron a la familia del baleado para informarle lo sucedido.
La Policía científica ya se encuentra trabajando en el caso. Los parientes del ultimado esperan que en las próximas horas den con el paradero del homicida y sus compinches para que paguen por su crimen.