Ataviada en un delicado vestido color blanco y rodeada de rosas naturales, la imagen de la Virgen de la Divina Pastora fue testigo, una vez más, de la manifestación mariana protagonizada por cientos de baruteños que se congregaron este domingo en la Plaza de Cumbres de Curumo para rendirle tributo. NP
En el año 2002 un grupo de feligreses del municipio no pudo viajar a Lara para venerar como es costumbre cada 14 de enero a su patrona, por lo que decidió celebrar una homilía en su nombre en la localidad. Desde entonces, la festividad religiosa se ha desarrollado, ininterrumpidamente, el domingo posterior a la fecha oficial.
La tradición, que desde hace ocho años se realiza a cielo abierto, recibió en esta oportunidad a cerca de 1.500 devotos, quienes acompañados por el acalde de la jurisdicción, Gerardo Blyde, elevaron sus oraciones a la Santísima Virgen, la mayoría de ellas dirigidas por la paz y reconciliación de Venezuela.
“Es el momento oportuno para que nuestra madre interceda por el país”, señaló Pedro París, organizador del evento. “Este es un acto cargado de fe y en agradecimiento por todas las bendiciones que recibimos de nuestra Divina Pastora”, precisó.
Entretanto, María González aseguró ser fiel devota de la Virgen. “Son muchos los favores que me ha concedido a lo largo de mi vida. Sus milagros no tienen límites, solo hay que pedirle con fe y amor”, destacó, al tiempo que instó a los vecinos a consolidar sus creencias y a no permitir que las adversidades los aparte del camino adecuado.
La agrupación Shitapta Coa fue la encargada de llevar la batuta de la Misa Criolla, la cual contó con un variado repertorio de canciones que amenizaron la tarde. Por su parte, Sol Larense Ensamble le puso punto final a la celebración mariana con una sentida serenata.
