Para la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela, FEDECAMARAS, las medidas anunciadas por el presidente de la República, Nicolás Maduro, no atacan la raíz del problema económico que está viviendo Venezuela. Los anuncios apuntan más, a resolver un problema del Gobierno, que a resolver los problemas de la gente.
El ambiguo anuncio sobre un sistema cambiario de tres mercados, insiste en seguir regalando unos dólares que no tenemos a 6.30, sin embargo, el mercado a través de la bolsa de valores, en caso de ser bien implementado, reconocemos que puede abrir una ventana de oportunidad para legalizar las transacciones en divisas.
La efectividad del mecanismo anunciado dependerá de cuan libre sea. Exhortamos al pronto y oportuno anuncio por parte de los ministros del área económica del funcionamiento de los nuevos procesos del sistema cambiario.
El problema económico es grave, tal y como lo hemos informado en nuestras diversas intervenciones públicas, y no se pueden seguir postergando las soluciones. Las medidas no deberían ser anunciadas por capítulos, sólo generan más incertidumbre en momentos que es urgente generar confianza. Un cambio de dirección no es sólo necesario es Urgente.
Reiteramos la necesidad de un cambio del modelo económico. En Venezuela, las empresas públicas no funcionan y sus productos no aparecen en los anaqueles, y las empresas privadas tienen enormes obstáculos para producir. Es urgente reactivar el aparato productivo a través de un diálogo franco y sincero. Sin embargo vemos como se sigue atacando a la empresa privada; ahora van contra los distribuidores y almacenadores. Satanizar a este importante eslabón de la cadena de distribución es un error que tendrá mayores consecuencias en el abastecimiento.
Los centros de distribución son absolutamente necesarios para una correcta planificación de envíos a los puntos de venta. En cualquier país del mundo este eslabón de la cadena es quien se encarga de almacenar y posteriormente asignar con rutas planificadas y optimizadas la llegada del producto a los anaqueles.
Rechazamos un estado policía con estructuras de movilización política en el cual se restringen libertades económicas amparadas en la Constitución.
En Venezuela es un delito el almacenar. Las continuas amenazas y el peligro de fiscalizaciones amañadas, con el único objetivo de confundir mediáticamente al consumidor, sólo logrará que haya más desconfianza y que no haya inversiones en centros de distribución; que repetimos son absolutamente necesarios.
En cuanto al aumento salarial por decreto, que como lo anunció el presidente Nicolás Maduro, “en tiempo de revolución se han dado 28 incrementos salariales”; sólo constituyen un reconocimiento expreso al fracaso del gobierno en derrotar a la inflación. Para recuperar el verdadero valor del salario es imperativo medidas eficaces para controlar la inflación.
No se produjeron anuncios ante la enorme crisis fiscal que atraviesa el país y ni siquiera el reconocimiento explícito de la misma. El país requiere de anuncios que generen confianza. A Venezuela le urgen reformas que, reconociendo en primer término la delicada situación económica, enserien el comportamiento fiscal del gobierno.
Para FEDECAMARAS la solución es impulsar la producción hecha en Venezuela, para ello se necesitan políticas macroeconómicas claras y compartidas y reglas justas que generen confianza.
Lograr una economía fuerte es la base para avanzar en soluciones que beneficien a todos los venezolanos. Esperamos iniciar un proceso de discusión con el Gobierno nacional que conduzca a acuerdos sustantivos y tangibles para la superación de las dificultades actuales con sentido de compromiso y urgencia.