El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, animó hoy a los inversores franceses a acudir a su país, que va a “multiplicar” las oportunidades gracias al proceso de paz, y destacó la solidez económica y las garantías de estabilidad.
“Quiero ser un país aburrido para los inversionistas”, dijo con un toque de ironía Santos durante su visita a la patronal francesa Medef, en su última jornada de estancia en París.
En Colombia a los empresarios extranjeros “los tratamos como uno de los nuestros” con “unas reglas de juego claras, predecibles”, aseguró.
Se esforzó en transmitir el mensaje de que con las negociaciones con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no sólo “se van a multiplicar las oportunidades” de negocio, sino que además no quedará comprometido ninguno de los principios de la libre empresa o del juego democrático, en contra de lo que pretende la “propaganda destructiva”.
Insistió en que su Gobierno negocia “con una posición de fuerza”, se mostró optimista sobre el resultado final y señaló que muchos economistas calculan que la paz podría aportar un 2 % de crecimiento adicional a la economía.
Eso, partiendo de una base muy alta, ya que la economía colombiana creció un 4,7 % en 2014, el mayor ritmo de los países de ingreso medio, y más elevado que el de los 34 miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con la que Colombia trabaja para su adhesión.
Santos afirmó que su país tiene “un crecimiento muy sano”, “acompañado de una creación de empleo como nunca antes”, en concreto tres millones de puestos de trabajo en cuatro años, que han permitido reducir la tasa de paro durante 48 meses seguidos.
Tras su paso por el Medef, donde se reunió con el presidente de los patronos franceses, Pierre Gattaz, se trasladó a la residencia del embajador colombiano en Francia, donde recibió al secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, que le entregó un informe dedicado a las reformas que necesita su país.
En el documento, que debe servir para la preparación del Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018 en el que trabaja el Gobierno, la organización se refiere a un “paquete de reformas” que Colombia necesita, en particular la tributaria, que “debería convertirse en una prioridad absoluta”.
La constatación de la OCDE es que los ingresos fiscales “son insuficientes para hacer frente al gasto público y la inversión necesarias para reducir la brecha de productividad existente” y su propuesta es un sistema impositivo “más progresivo”, que reduzca el impacto negativo en el empleo, estimule el crecimiento verde y combata “con determinación” la evasión fiscal.
Gurría no quiso avanzar una posible fecha para el ingreso de Colombia en el conocido como el “Club de los países desarrollados”, pero adelantó que los 23 comités con los que están tratando las autoridades colombianas van a tener que continuar su labor este año y “seguramente” también en 2016.
El secretario general consideró que “unos meses más o unos meses menos no van a cambiar la dirección de las cosas”, al tiempo que felicitó a Santos por “los excelentes resultados” obtenidos por Colombia durante su mandato, que “ha reducido de forma muy importante la pobreza en cinco años”.
Santos, que ayer se entrevistó con el jefe del Estado francés, François Hollande, se reunió hoy con el presidente de la Asamblea Nacional, el también socialista Claude Bartolone, antes de ir a la parisina plaza de la República para rendir homenaje a las víctimas de los últimos atentados yihadistas, en los que 17 personas fueron asesinadas.
Ante el Medef, Santos hizo hincapié en que el pueblo francés había demostrado con las manifestaciones de respuesta a esos ataques que, “cuando toca unirse, se une (…) de forma ejemplar”, lo que “para nosotros -aseguró- ha sido una gran inspiración”. EFE