Francisco Illarramendi, gerente del fondo de inversión de los ex empleados de Pdvsa, ha sido sentenciado a 13 años de prisión por un plan de estafa de inversiones en Connecticut por valor de cientos de millones de dólares.
Hace cuatro años Illarramendi se había declarado culpable de varios cargos de fraude y confabulación en lo que fiscales federales han calificado el mayor caso de delito económico en la historia de Connecticut.
El ex financiero fue acusado de apropiarse de 20 millones de dólares en una enorme estafa que expuso a inversionistas, en su mayoría extranjeros, a perder más de 200 millones de dólares, en su mayoría de Petróleos de Venezuela.
En tal sentido, el diputado Julio Montoya- denunciante de Illarramendi- expresó su satisfacción pues esta sentencia por el tribunal federal de EEUU, demuestra que vale la pena investigar y denunciar los hechos de corrupción.
Recordó el parlamentario zuliano que Illarramendi se apropio de mil 500 millones de bolívares del fondo de pensiones de PDVSA, hecho que fue denunciado ante la Fiscalía General de la República y que hasta la fecha no se ha investigado ni mucho menos enjuiciado a los involucrados.
“Hemos presentado elementos de juicio que involucran al entonces presidente de PDVSA, Rafael Ramírez, en esta estafa pues el Illarramendi fue empleado y asesor de la estatal petrolera”.
Es imposible ocultar que el exfinanciero fue autorizado por la directiva de PDVSA para manejar a su antojo y discreción el Fondo de Pensiones de los empleados, si ese aval no hubiese podido apropiarse de ese dinero.
A pesar que los hechos demuestran lo contrario, voceros del Gobierno han dicho que Petróleos de Venezuela puso fin a un contrato con Francisco Illarramendi en 2004, un año antes de que comenzara la trama fraudulenta.
Montoya sentenció que aunque se logró la condena del estafador, es lamentable que la justicia se haya logrado en los Estados Unidos y no en Venezuela. Prensa Dip. Julio Montoya