El floreciente embarazo de la Duquesa de Cambridge sigue su curso. Sin prisa, pero sin pausa. Con tan sólo diez semanas para el nacimiento de su pequeño -príncipe o princesa está por ver-, la futura mamá ha trazado un plan urgente acerca de todos aquellos puntos importantes que conciernen a la llegada al mundo de su bebé, que se espera que se produzca en las fechas próximas a su cuarto aniversario de boda a finales de abril. hola.com
La Duquesa ha dejado atrás lo peor –las fuertes náuseas que le impedían cumplir con su agenda oficial- y rebosa ahora de energía -especialmente después de su babymoon en el Caribe- para organizar la bienvenida. Hello! ha revelado en primicia que, contrariamente a lo revelado, los Cambridge no tienen intención de seguir con la tradición real de contratar a una enfermera de maternidad o a una nanny en los primeros meses de vida del bebé, sino que están dispuestos a asumir ellos mismos todos los cuidados para fomentar el vínculo paterno-filial, tal y como hicieron con el príncipe George: “El Duque y la Duquesa desean disfrutar de estar con su nuevo bebé y todo lo que eso conlleva”, reveló una fuente real a la revista.
Madre moderna
Fue casi tres meses después del nacimiento del príncipe George cuando el príncipe Guillermo le pidió a su propia niñera de la niñez, Jessie Webb, que abandonara su retiro para echar una mano a los padres primerizos y los Duques no contrataron a tiempo completo a María Borrallo, la niñera española del príncipe George, hasta que su bebé tuvo los ocho meses de edad. Y como parte de esta rutina que perfila el enfoque de paternidad moderna de la pareja real parece que la madre de la Duquesa, Carole Middleton, se involucrará en el cuidado de su segundo nieto en las semanas posteriores al nacimiento igual que hiciera con el príncipe George.
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Fotos Reuters
