La violencia sigue sin dar tregua en Ciudad Guayana, que ocupa el decimosegundo puesto entre las ciudades más peligrosas del mundo y segundo en el país, según la asociación civil mexicana Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal. Este fin de semana volvió a hacer alarde de su fuerza, al enlutar a cinco familias guayanesas.
Uno de los hechos se registró la noche de este sábado en Villa Betania, Puerto Ordaz, cuando Pedro Vladimir González Bolívar, de 44 años de edad, se disponía a botar los desperdicios a bordo de su vehículo -un Dodge modelo Forza, color rojo, placas AI662BA- cuando fue interceptado por unos sujetos que le propinaron varios impactos de bala en la cabeza.Fue encontrado por allegados en la entrada de la urbanización, tendido en el asfalto al lado de su carro. Trascendió que pertenecía al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Construcción (Sinatracom), y que trabajaba en el Departamento de Seguridad y Control de Pérdida de CVG Venalum.
Por unos cauchos
“¡Me mataron a mi bebé!”, exclamaba la madre de William Enrique Guerrero Báez, de 30 años de edad, en las afueras del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). Guerrero recibió un disparo en el corazón por parte de un vecino, este sábado en la calle Caroní del sector Cristóbal Colón II, en San Félix.
Su esposa explicó que hace algunos meses le habían hurtado unos cauchos, pero los vecinos del sector fueron testigos de los responsables del hecho. Guerrero tuvo una discusión acalorada con los presuntos delincuentes, y llegando a la vivienda de su mamá, uno de los implicados, en compañía de cuatro sujetos más, le disparó con una bácula. La víctima fue trasladada a la clínica Manuel Piar, pero llegó sin signos vitales.
El hombre, que se desempeñaba como obrero de taladro petrolero en Pdvsa, dejó huérfanas a dos niñas, una de 7 y otra de 9 años de edad.
Sus familiares responsabilizan del hecho a Marcos José Rondón, apodado el Pichón, a Carlos Alexander Rondón, alias el Carlitos, así como a María Elvira Rondón, madre de los sujetos, y a la hermana de ellos, Mariannys Josefina Méndez Rondón. “Ellas dos los incitaron para que hicieran lo que hicieron”, señaló la doliente.
Tras un robo
Eran cerca de las 8:00 de la noche del sábado cuando Carlos Ramón Cordero, de 56 años de edad, se desplazaba por las parcelas de El Roble a bordo de su Chevrolet Caprice azul, haciéndole transporte a una mujer. En ese momento fueron interceptados por desconocidos, quienes los sometieron y despojaron de sus pertenencias. Los malhechores le dispararon a Cordero, quien no pudo salvarse al ser trasladado al Hospital Dr. Raúl Leoni, donde falleció horas más tarde.
José Gregorio Barrios, de 16 años de edad, decidió a eso de las 12:30 de la madrugada que ya era hora de retirarse de la fiesta en la que estaba y regresar a su casa, en la invasión 25 de Marzo, en San Félix.
El adolescente, que se desempeñaba como pregonero desde hace varios años, fue abordado por unos sujetos que iban en moto por la calle conocida como Vuelta La Burra, y sin mediar palabras le propinaron varios disparos. Según lo declarado por los familiares, el joven quedó tendido en el asfalto a tan solo dos cuadras de su hogar.
“Nos enteramos porque fueron hasta la casa a avisar que él estaba ahí”, comentó uno de los familiares. Barrios era el menor de cinco hermanos, y vivía con sus padres, estos lo describieron como un joven trabajador. Agregaron, “que uno supiera, él no tenía ningún tipo de problema con nadie”.
Mientras comía…
Gustavo Adolfo Chiquita Tamaroni, de 28 años de edad, se encontraba junto a una mujer de 28 años, según investigaciones preliminares, comiendo en un local que lleva por nombre Los Sancochos de María, adyacente a Llovi Hotel, ubicado en la prolongación de la avenida Gumilla hacia la vía a El Pao, en San Félix, cuando unos sujetos que se trasladaban en un vehículo Fiesta color verde oscuro, se estacionaron a unos 50 metros del local, de este descendieron dos hombres los cuales abrieron fuego contra Chiquita y su acompañante.
El joven ingresó al Hospital Dr. Raúl Leoni de Guaiparo, lugar donde falleció. Su compañera resultó herida en el cuello.