El ELN, segunda guerrilla de Colombia y actualmente en conversaciones preliminares de paz con el gobierno, liberó este domingo al alcalde de una localidad del noroeste del país, a quien mantenían secuestrado desde diciembre, informó el Ejército.
por Lissy DE ABREU/AFP
“Hemos confirmado que el alcalde (de Alto Baudó, Fredys Palacios) fue liberado en la madrugada por una decisión del ELN (Ejército de Liberación Nacional), sin que hubiera presión militar ni nada. Simplemente lo dejaron libre en una zona selvática de Chocó”, el departamento donde se ubica la localidad, dijo a la AFP una fuente del Ejército.
“Por las informaciones que tenemos, está bien de salud y fue recogido por la Policía luego de ser liberado”, añadió el militar.
Un helicóptero del Ejército estaba siendo preparado para salir a buscar a Palacios desde Quibdó, la capital de Chocó.
En la mañana de este domingo, el alcalde pudo comunicarse con su familia para hacerles saber que está en buenas condiciones y que pronto estará de nuevo en casa.
“Él llamó y dijo que ya lo habían liberado, que lo habían dejado en una comunidad y que estaba bien (…) lo estaban llevando a la cabecera municipal”, dijo a la radio RCN la esposa del alcalde, Abelinda Medina.
Medina dijo sentir “una felicidad inmensa, grandísima” tras haber hablado con su marido y aseguró que ella y sus seis hijos le esperarán en Alto Baudó para recibirle con celebraciones, junto a la comunidad.
El ELN reinvindicó hace unas tres semanas el secuestro del alcalde y entonces aseguró que había privado de su libertad a Palacios para “obligarlo a rendir cuentas de la administración municipal”.
“El alcalde (…) hizo campaña electoral entre las comunidades, prometiendo invertir en salud y educación, pero una vez posesionado en el cargo, hizo lo mismo que el resto de funcionarios del departamento, que es robarse el dinero del presupuesto municipal”, indicó el ELN en un comunicado en esa ocasión.
Hasta el momento, la guerrilla no se ha manifestado sin embargo sobre la liberación de Palacios.
El burgomaestre cayó en manos de esa guerrilla el 16 de diciembre, cuando se transportaba en lancha del Alto al Medio Baudó, una zona de la costa del Pacífico colombiano, de acuerdo con autoridades regionales.
Esa misma semana, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, pidió su “pronta liberación”, a la vez que calificó la retención como un “crimen inaceptable”.
Esta semana, el ELN se atribuyó además en un comunicado el secuestro de cuatro geólogos, ocurrido el pasado 19 de febrero en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela y con fuerte presencia guerrillera.
La retención de los cuatro profesionales se produjo, según el grupo rebelde, porque “se disponían a desarrollar estudios relacionados a las actividades mineras”, a los que el ELN se opone.
Esa guerrilla anunció junto al gobierno en junio pasado que llevaban adelante diálogos exploratorios con el fin de instalar una mesa de negociación formal para poner fin a 50 años de conflicto armado.
Esa mesa iría en paralelo a la que el gobierno sostiene en Cuba desde noviembre de 2012 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunista), la principal guerrilla del país con unos 8.000 rebeldes en sus filas.
Fundada por universitarios en los años sesenta, la guerrilla del ELN -que tuvo en sus filas a varios sacerdotes católicos, entre ellos el fallecido cura español Manuel Pérez que la dirigió por casi dos décadas- cuenta con unos 2.500 combatientes.
Colombia vive un conflicto armado de más de medio siglo, en el que han participado guerrillas, paramilitares, fuerzas militares y bandas narcotraficantes, y que ha dejado oficialmente más de 220.000 muertos y 5,3 millones de desplazados. AFP