A continuación la entrevista realizada por el periodista DANIEL LOZANO de El Mundo de España a la esposa del alcalde Metropolitano, Antonio Ledezma.
Llegó su turno. Mitzi Capriles de Ledezma, la mujer del alcalde mayor de Caracas, ha tomado con fuerza la bandera de la libertad de su marido, apresado tras la última andanada de Nicolás Maduro contra la oposición. Está dispuesta a recorrer el mundo para denunciar la “injusticia” cometida contra Antonio Ledezma. “Estoy preparada mental y espiritualmente para lo que venga”, asegura tras visitarle en la prisión militar de Ramo Verde, el mismo calvario que recorre Lilian Tintori, la mujer de Leopoldo López, desde hace un año.
- ¿Qué ha sabido de su marido en las últimas horas? ¿Cuál es su ánimo?
- He podido verlo en la cárcel de Ramo Verde, tras una semana de su injusta detención. Él se encuentra fuerte y sereno, posee un temple muy sólido.
- ¿Cómo explica la violencia de su detención? Hacía falta medio centenar de hombres para llevárselo a la fuerza?
- ¡No puedo explicármela! Es un completo abuso y violación a sus derechos constitucionales, mi esposo es el alcalde metropolitano de Caracas, un hombre de honor, no un delincuente. No hacía falta ni un hombre armado para llevárselo; si le hubiesen extendido una citación, él hubiera asistido voluntariamente. Él ha vivido en Venezuela toda su vida y nunca tuvo intenciones de ocultarse ni de irse de nuestro país.
- Le acusan de ser un golpista…
- Esa es una acusación falsa, sin ninguna base. Mi marido ha participado durante toda su carrera política, que es muy extensa, apegado al cumplimiento de la Constitución Nacional. Es algo absurdo que se le acuse de golpista o de conspirador.
- ¿Basta el testimonio de un militar, que además denuncian fue torturado, para mandar tras las rejas al principal alcalde del país?
- Rotundamente no. Esa es otra arbitrariedad y manejo fraudulento de la justicia y de los entes públicos en nuestro país. El Ministerio Público presenta este testigo, que mi esposo no conoce y además existe información que presuntamente este testigo estuvo en un sitio terrible en el Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia), llamado ‘La Tumba’. Su testimonio ni siquiera puede ser tomado en cuenta legalmente, pues fue expuesto públicamente por el Gobierno en televisión, violando el debido proceso.
- ¿Teme que su apresamiento se prolongue en el tiempo y hasta quién sabe cuándo, como ya ocurre con López?
- En nuestro país no hay estado de derecho. El juicio de Leopoldo, el que se pretende hacer a mi esposo, como el de tantos otros presos, son juicios políticos, que además de violar sus derechos humanos, obedecen al mandato ejecutivo del Gobierno. No obstante tenemos mucha fe en que la sensatez se imponga; en que los funcionarios honestos y decentes de la administración pública, así como la sociedad civil y partidos políticos que nos apoyan, ejerceremos suficiente presión para que sean liberados todos los presos por pensar distinto.
- ¿Asumirá usted el papel que le tocó a Tintori?
- Yo asumiré igual que lo ha hecho ella la defensa incondicional, permanente e incansable por los derechos humanos de mi marido, sin duda alguna.
- Su marido fue uno de los políticos más odiados por Hugo Chávez, quien incluso inventó un jefe de Gobierno en Caracas para quitarle competencias y presupuestos. ¿Imaginaba que con Maduro continuaría la persecución?
- Maduro es el ungido de Chávez. Su manejo ha sido ineficiente y corrupto, lo que nos ha traído una profunda crisis social, moral, económica, de seguridad, de salud… Así que era de esperarse que ante las declaraciones de advertencia, alarma y denuncia que venía haciendo mi esposo responsablemente, Maduro continuara con su persecución.
- ¿Por qué esa inquina del chavismo contra Ledezma?
- Porque este régimen no es demócrata, no tolera la disidencia, porque Antonio ha sido un luchador incansable contra los desafueros y ha dejado en evidencia a través de su voz demócrata, los desmanes que sin ninguna vergüenza ejecuta el Gobierno. Porque han visto que como alcalde metropolitano ha sido eficiente durante su gestión, además porque es el funcionario público de elección popular que ha obtenido el mayor número de votos después del presidente.
- ¿Cómo se consigue sacar adelante algún proyecto en la Alcaldía Mayor con sus competencias tan devaluadas?
- Con muchísimo trabajo y buena voluntad, rodeado de un equipo talentoso, utilizando bien los pocos recursos y atribuciones que le dejaron.
- ¿A qué se debe la embestida actual del chavismo contra la oposición?
- A que no aceptan las críticas ni a quienes piensan distinto porque no son demócratas.
- La detención de su esposo, dicen dirigentes, evidencia el desespero del gobierno. ¿Es inminente la vuelta del diálogo para encontrar salida a la crisis? ¿Su esposo lo apoyaría?
- Mi esposo participó en un “dialogo” el 18 de diciembre de 2013, cuando junto a otros funcionarios electos por voluntad popular fueron invitados a Miraflores por Maduro. De esa visita sólo se desprendieron burlas y ofensas en los días posteriores para quienes asistieron (durante meses Maduro denominó a Ledezma el vampiro, buscando la risa fácil de sus seguidores). Mi marido aceptaría dialogar con las garantías suficientes y seguras que esas conversaciones serían tomadas en cuenta, si de ello dependiera el rescate de las instituciones nacionales y un acuerdo para el restablecimiento de la democracia en Venezuela.
- Ustedes están emparentados con líderes del chavismo, en concreto el ministro Andrés Izarra. ¿Ha recibido alguna información de ellos?
- No, el tema político no es tratado en familia por respeto a la tendencia que cada quién tiene. Hemos practicado la tolerancia bajo la premisa de que el amor a la familia está por encima de cualquier diferencia.
- ¿Qué le diría a Maduro si le tuviera aquí, frente a usted?
- Le diría que le dé paso a la alternativa democrática para comenzar con la reconstrucción de Venezuela.