Dicen que los atardeceres en Venezuela tienen magia, yo digo que tienen vida y una buena dosis de optimismo, que te abraza el alma y te hace olvidar lo pesado que pudo haber sido el día. Una escena natural convertida en un verdadero espectáculo, que puedes admirar desde cualquier parte del mundo y sin necesidad de pagar un solo centavo. No discrimina, no exige, no critica, sólo da lo mejor de sí y te acurruca entre sus brazos.
Texto y Fotos: Joselina Rodríguez/ Claseturista.co
La playa es mi lugar favorito para contemplar el atardecer y en Venezuela, contamos con numerosas de ellas por toda nuestra amplia geografía. Las imágenes que mostramos en esta oportunidad, pertenecen al Parque Nacional Mochima, ubicado entre los estados Anzoátegui y Sucre.
Durante el día sus cálidas aguas dan la bienvenida tanto a propios como a visitantes, quienes buscan un momento para alejarse de la rutina y disfrutar de un ambiente totalmente diferente. Por la tarde, ya el ritmo de visitantes va disminuyendo y sólo van quedando algunos que esperan con ansias el inspirado atardecer. Yo he decidido describirlo con dos palabras: sublime y celestial.
La composición de colores, las aguas calmadas, las nubes y todo, absolutamente todo se presta para que dicha escena sea espectacular. Son minutos maravillosos que transcurren frente a ti teniendo como protagonista principal al Rey sol, quien ya disminuyó la intensidad de sus rayos y ha decidido descansar.
Atardeceres que han sido motivo de inspiración para cantantes, pintores, escritores, poetas y más, que se dejan llevar por la magia que emite esta etapa del día. El Parque Nacional Mochima, uno de los destinos turísticos más visitados en Venezuela, fue en esta oportunidad el escenario que me regaló una puesta de sol maravillosa, que disfruté en buena compañía y con una deliciosa bebida.
