El secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica de España, Jesús Gracia, descartó este jueves que las gestiones que realiza el expresidente del Gobierno Felipe González para defender a dirigentes de la oposición venezolana puedan enturbiar las relaciones con Venezuela.
En una rueda de prensa en Río de Janeiro, Gracia aseguró que desde un primer momento González aclaró que su gestión es una iniciativa privada y que su objetivo es impulsar un entendimiento en Venezuela, por lo que en nada interfiere en las relaciones bilaterales.
“Además, como dejó claro el ministro (español de Asuntos Exteriores) José Manuel García-Margallo, en todo momento González informó al Gobierno de sus intenciones y gestiones”, afirmó el secretario, que inició el martes una visita oficial de cuatro días a Brasil.
Recordó igualmente que García-Margallo agradeció al expresidente por llamarle para explicar su decisión de asumir la defensa de los opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma, y que le deseó suerte en su propósito.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusó el martes a González de respaldar un supuesto golpe en su contra y de estar tras una campaña de “guerra psicológica” con la idea de perturbar la paz del país.
Para Gracia, sin embargo, el deseo del expresidente es asumir el papel de “mediador para lograr un mayor entendimiento en Venezuela, ya que las cosas no se resuelven a los gritos”.
Para reforzar ese papel, González pidió el apoyo de expresidentes latinoamericanos que cuentan con prestigio en la región, como el chileno Ricardo Lagos, el uruguayo Julio María Sanguineti y el brasileño Fernando Henrique Cardoso.
Por otro lado, indicó que España también “ha manifestado públicamente su apoyo” a las gestiones que realiza la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para promover un diálogo entre el Gobierno y la oposición en Venezuela. EFE