La fotógrafa francesa, Iris Brosch, se dedica a trabajar en retratos de mujeres que utilizan talla grande, resaltando su esplendor y su belleza, además de su femeneidad, que nada tiene que envidiarle a cualquier otro tipo de mujer.
Con su trabajo, busca contribuir a la toma de conciencia acerca de los estereotipos de belleza que oprimen a las mujeres, que son la mayoría de las veces las que ocupan los espacios en la pantalla grande, en la publicidad y en los medios, alejadas de la imagen de la mujer real.
La fotógrafa del Feminismo físico
Mundialmente conocida por “restaurar la dignidad y la fuerza en la fotografía femenina“, Brosch destaca por sus imágenes de gran sensualidad, donde confluye un clasicismo atemporal con algunos toques estéticos propios del arte contemporáneo.
Es una fotógrafa autodidacta que comienza a trabajar hace 15 años, y vive parte del año en París y el resto en Nueva York, la ciudad donde nació.
En contra del mundo obsesionado con la imagen de la mujer delgada y alta, la fotógrafa emprende el movimiento contrario. Con sus modelos que se apartan de la talla XXS ha desarrollado el proyecto “Feminismo físico”, obteniendo gran éxito alrededor del mundo.
La artista reflexiona acerca del espacio que ocupa la mujer, señalando que este, al igual que se cuerpo, tiende a ser cada vez más “delgado”, hasta casi desaparecer. Con estos trabajos, la fotógrafa busca así recuperar el espacio, trayendo a la luz la belleza de otras formas, de otros cuerpos y otras maneras de ser mujer.
Vía lr21.com.uy