El Real Madrid se impuso al Granada en la jornada 29 de la Liga BBVA, con un escandaloso partido de Cristiano Ronaldo, actor principal de una goleada histórica (9-1), anotando cinco goles y un ‘hat-trick’ en ocho minutos para abusar del Granada, al mando de una ‘BBC’ que mostró su mejor nivel en el regreso de James y sin Isco Alarcón con una fiesta tras un ‘Clásico’ con final amargo (2-1).
Con ansias de protagonismo, activo en defensa y generoso con sus compañeros, Ronaldo demostraba pronto que era su día. Un centro suyo originaba la primera ocasión, en la que Benzema bajaba un balón a la izquierda de un Oier con mucho trabajo, que se anticipaba después a Bale tras un centro del francés.
Con la primera parte del Camp Nou en la retina, los blancos no daban tregua con un Ronaldo que enviaba un disparo peligroso al lateral de la red, después de su tercera bicicleta en un cuarto de hora. Sin embargo, cuando parecía más evidente el monólogo local, el Granada sacaba las uñas ante el primer error del Real Madrid.
Un malentendido entre Casillas y Marcelo en la salida de balón estuvo a punto de ser aprovechado por Robert Ibáñez, cuyo disparo cruzado amenazó con inaugurar el marcador, y provocó los pitos de la grada. La reacción fue un asedio con centros desde la banda y la esquina, pero el Granada aguantaba la embestida.
Tras varias combinaciones erráticas, los de Ancelotti volvían a avisar con una gran internada de Marcelo, cuyo centro no acertó a enviar a la redArbeloa, aunque sería el preludio del primer tanto. El menos brillante de una activa ‘BBC’, Bale, ganaba un balón largo por velocidad, y superando a Oier, marcaba a puerta vacía.
Acto seguido, un centro al área que no acertó a rematar Benzema tras el control caía a los pies de Cristiano y James, que supieron salir del embrollo con un genial pase del colombiano al luso, que definió a la perfección para iniciar su festival, que continuó un disparo franco a un rechace de un centro de Marcelo.
El ‘hat-trick’ del portugués llegaba con un disparo potente desde el costado izquierdo en el que Oier doblaba la mano sin poder evitar el cuarto tanto antes del descanso, al que se llegó con otro susto del Granada, tras un misil de El Arabi al travesaño que botó cerca de la línea, y ante el que Casillas no podía hacer nada.
Vía La Información.