Al respecto, considero que en Venezuela está en marcha un fraude electoral, por una parte, porque el gobierno está en campaña electoral y al frente de ella, el mismo presidente de la República, utilizando descaradamente los recursos del Estado. Por ejemplo, intenta desviar la atención de los grandes problemas nacionales bajo la argucia de un patriotismo o un nacionalismo para promocionar su oferta y sus candidatos bajo una estrategia propagandística hegemónica, subliminal, costosa y fuera del contexto real nacional. Por otra parte, los factores de oposición específicamente los aglutinados en la MUD, parecieran ser parte de la estrategia del gobierno, realmente, somos la parte más importante en la estrategia del gobierno.
El gobierno actúa mediante una propaganda psicológica, trata a la oposición de manera colectiva e individual como preparando el terreno para aceptar desde ya los resultados electorales frente a las elecciones Parlamentarias. Esta situación, produce una especie de desgano, de angustia, desmotivación, apatía, desmovilización electoral y resignación de la población. A mi juicio, los elementos de la estrategia visiblemente más importante puesta en marcha por el gobierno son los siguientes: 1) La no publicación de la fecha electoral, ya acordada con el gobierno, 2 ) La no publicación del cronograma electoral estructurado bajo la estrategia de acción del PSUV, 3) La segura súbita modificación de las circunscripciones electorales, que nos dejaran sin balance, 3) La creación de centros de votación en los consejos comunales controlados por el gobierno, 4) El manejo a su antojo de las máquinas de inscripción de los nuevos votantes, 5) Las migraciones ilegales, 6) la amenaza de eliminación del Parlatino para luego elegirlo en una elección de segundo grado, donde consumado el fraude, los pondrían a dedo. 6) El gobierno marca la pauta y la oposición simplemente reacciona. 7) El despliegue de una feroz propaganda acerca de la inexistente gestión oficial, que la hace aparecer ante el pueblo como “muy exitosa”, pero toda Venezuela sabe que es todo lo contrario.
Todo esto sucede, sin ningún tipo de respuesta por parte de la MUD que pueda enfrentar políticamente esa estrategia propagandística que viola las normas electorales y que constituye un delito. Los partidos políticos de oposición, no han podido o no han querido coincidir en brindar una respuesta al pueblo, entiendo que la hegemonía de los medios de comunicación por parte del gobierno impide la promoción de la estrategia de la MUD, pero existen mecanismos de organización social para llevar el mensaje unitario a cualquier rincón del país que permita contrarrestar y detener este ultraje electoral que está en marcha y el cual, no ha alcanzado su mayor expresión.
La MUD no puede permitir que se cometa un fraude electoral, porque es uno de los delitos más graves contra la voluntad popular de un país. Su gestión política no es solamente para escoger o contar candidatos a diputados que le toca a cada partido, debe orientar su acción hacia los problemas básicos del país porque es muy grave lo que está sucediendo. No estamos frente a un proceso electoral normal, esto no será un camino de rosas y la MUD, al lado del pueblo venezolano, está allí para evitar que el oficialismo actúe a placer haciendo lo que le da la gana.
Por tanto, tenemos la obligación de defender las esperanzas del pueblo que quiere un cambio y está cansado de tanta política aguda, los venezolanos quieren ser ciudadanos normales, de un país normal que conozcan lo normal de política.
Tenemos la obligación de hacerle las cosas difíciles al gobierno, al cual hay que plantársele dispuesto a todo por la democracia. Amigos de la MUD, incorporen al pueblo para impedir y enfrentar constitucionalmente las tramposerías del CNE en la calle. Lo que está en juego es tan importante que no podemos darnos el lujo de padecer de indolencia. La mejor forma de luchar contra este fraude, es romper con el comodismo criollo, armar un mensaje de unidad real, contribuir a movilizar al pueblo, presentar candidatos con liderazgos naturales que representen a todos los sectores del país. No podemos permitir que unos pocos pretendan aprovecharse de esta oportunidad histórica para cambiar el rumbo del país y lanzar por la borda esta coyuntura que ofrece todas las condiciones favorables para lograr el cambio.
Twitter @joaquinchaparro