Una muchedumbre hizo cola desde la madrugada de ayer en las afueras de Pollos Latinos, en Puerto La Cruz, para comprar dos aves de corral. El lugar estuvo custodiado por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB). Diario El Tiempo
A las 10:00 de la mañana, unos 300 ciudadanos estaban organizados en fila india a la espera de ser despachados en el único local comercial adyacente al mercado porteño que está vendiendo productos a precios regulados, según dijo un cliente que no quiso identificarse.
Una de las presentes, Beatriz Rojas, aseguró que las primeras personas que hicieron cola se presentaron en el sitio a la 1:00 de la madrugada, aunque ella arribó a las 4:00 am, después de un viaje de una hora y 15 minutos que emprendió desde su casa ubicada en Naricual, zona rural del municipio Bolívar.
Realidad
“Nunca pensé que iba a tener que vivir algo así. En la madrugada también tenemos que tener cuidado con los indigentes que quieren vender los números que se entregan para llevar el control en las colas”.
Los precios publicados en el interior del negocio son los siguientes: kilogramo de pollo entero a 65 bolívares, kilo de muslo a Bs 88, de pechuga a Bs 125 y de alas Bs 71. Mientras que en el expendio municipal la unidad está siendo despachada a Bs 160 y Bs 180.
Un empleado de Pollos Latinos que prefirió mantenerse en el anonimato, informó que los lunes no abren las puertas porque los mataderos no despachan, razón por la cual atendieron a los clientes con los terminales de cédula de identidad 0-1 y 2-3.
“Estamos atendiendo por terminal de cédula y con un límite de dos pollos por persona. Los miércoles pueden comprar los clientes con los terminales 4-5, jueves 6-7, viernes 8-9 y los fines de semana lo estamos variando”.
Agregó que sólo pudieron recibir media gandola de pollo por parte de los proveedores, que es igual a 200 cestas, el equivalente a unos 6.000 kilogramos. Precisó que por día están atendiendo a unas 2.000 personas aproximadamente.
Añadió que por merma de transporte están perdiendo 47.000 bolívares, sin agregarle los gastos operacionales.
“Aquí también se pagan impuestos. Las pérdidas que estamos teniendo son muy grandes. Estamos preocupados por la situación”.