La desbordada economía de puertos se frenó. No hay la fluidez de dólares necesaria para sostenerla. La actividad portuaria ya no es la misma. Para este viernes sólo había nueve buques en Puerto Cabello donde la capacidad es de 37. La producción nacional también sigue en caída libre. Las consecuencias de este desequilibrio económico se sienten con fuerza en los anaqueles, reseña El Carabobeño.
Damiano Del Vescovo, presidente de Fedecámaras Carabobo, detalló que desde 2006 las importaciones del sector privado han caído en 46% en contraste con las cifras del sector público que en los últimos ocho años pasó de 9% a 55%.
Durante el último año se atendió 14% menos buques en Puerto Cabello, lo que es igual a 280 embarcaciones. En el puerto de La Guaira los números también han descendido. El promedio de manejo de contenedores de 2013 era de 10 mil semanales, en 2014 fue de seis mil y durante lo que va de 2015 el registro es de mil semanal, apenas el 10% de lo acostumbrado.
Esas cifras no serían alarmantes si la capacidad productiva de las industrias del país se usaran al 100%, con lo que se podría abastecer el mercado nacional y recuperar la política exportadora de algunos rubros.
Todo esto ha provocado que la escasez promedio en marzo haya cerrado, según Datanálisis, en 79,9% en los ocho principales rubros alimenticios.
Crisis de divisas
Esta crisis se deriva en la falta de liquidez de divisas. Las empresas del país en 2014 recibieron sólo 40% de los dólares requeridos para funcionar con normalidad. El sector automotor fue el más golpeado al adjudicársele 78% menos que en 2013. Y de manera general se les debe más de 10 mil millones de dólares a proveedores extranjeros.
Este año se suma como dificultad la inoperatividad del Sicad, que no subasta desde octubre, mientras que el Simadi “no cumple las expectativas, es un mercado que no está funcionando”.