El diplomático trotamundos estadounidense John Kerry es conocido por ser goloso. Pero sorprendió a encumbrados chefs esta semana al revelar que ama cocinar y que, en una ocasión, hasta estuvo al frente de una panadería.
En los años 70 cuando estaba “súper aburrido” trabajando en una práctica de derecho privado en su ciudad natal de Boston, se le ocurrió la idea junto a un amigo de abrir una pastelería que cerrara tarde en la noche.
“Salimos a cenar, y moría de ganas de comer una galleta con chips de chocolate. Y ese ha sido mi antojo toda mi vida”, broméo Kerry en un evento de conocidos chefs estadounidenses en el Departamento de Estado.
“Entonces dijimos: caramba, no hay un lugar en Boston donde podamos comprar una rica galleta tarde en la noche”.
Luego de recorrer la zona, Kerry y su amigo de entonces encontraron un lugar en el Faneuil Hall Marketplace, negociaron un espacio y dos meses después estaban ordenando un “coqueto nuevo horno” para encarar su aventura de negocio.
“Ya me estaba imaginando grandes objetivos de 40 locales en 40 ciudades muy rápidamente, y de repente me di cuenta que no tenía menúes, ni recetas”.
Dirigiéndose a renombrados chefs estadounidenses que participarán en la Expo Milan 2015 como representantes de su país, Kerry reveló que comenzó a preparar tandas de “todas las versiones de galletas de chocolate que pude en el horno de su casa”.
“Trabajando inteligentemente con melaza y chocolate puro Lindt y la mejor manteca que pudimos encontrar y demás, hicimos una gran galleta de chocolate”.
La pastelería Kilvert & Forbes abrió a tiempo y en un año ganó el premio a “Lo mejor de Boston”.
A pesar de que Kerry y su socio vendieron hace mucho su participación en el negocio, el local aún existe y el ex senador de Massachusetts sigue siendo uno de los clientes preferidos de sus galletas con chips de chocolate. AFP