El Gobierno de Cuba ha aprobado nuevas medidas para consolidar las cooperativas privadas que se han desarrollado en la isla con las reformas del presidente Raúl Castro, pero no pretende masificar la creación de estas formas de gestión no estatal, informaron hoy medios oficiales.
“Las cooperativas (no estatales) tienen un carácter experimental y aunque se avanza en su aplicación no tenemos por qué acelerar el paso, tenemos que cogerle el ritmo a los acontecimientos”, dijo Raúl Castro en la última reunión del Consejo de Ministros, celebrada el pasado viernes y de la que se informó hoy.
Para mejorar el funcionamiento de esa forma de gestión, el Gobierno permitirá ampliar a un año el tiempo máximo para contratar a trabajadores asalariados (ahora es de tres meses), si bien no podrán sobrepasar el diez por ciento de la cantidad de socios de la cooperativa.
También se establecerá como periodo de bonificación de impuesto los primeros seis meses después de la inscripción en el registro de contribuyentes, frente a los tres meses actuales.
Desde que se permitió en 2012 su constitución, se han creado en Cuba 498 cooperativas privadas no agropecuarias de las que están funcionando 347 y están en estudio 205 nuevas propuestas.
Un 88 por ciento de las nuevas cooperativas se concentran en los sectores de comercio, gastronomía y servicios técnicos y personales (59 %), construcción (19 %) e industria (10 %).
El Gobierno de Raúl Castro admite que hay aspectos negativos que han lastrado el funcionamiento de este plan experimental de cooperativismo privado como la burocracia para constituirlas, el acceso a los suministros y la tendencia al incremento de precios de productos y servicios.
El Gobierno decidió el viernes extender este experimento cooperativista pero bajo el principio de “no masificar la creación de cooperativas”, ya que la prioridad “deberá ser consolidar las que existen e ir avanzando de forma gradual”. EFE