El gobierno frente a la grave crisis económica y social que hoy atraviesa Venezuela, como es la escasez, el desabastecimiento, la inflación, la inseguridad, siempre trata de huir hacia adelante, porque no tiene respuesta para solventar estas problemáticas, y por eso siempre busca promover grandes escándalos y meterse en la confrontación meramente política, para sobrevivir a su propio desastre, y darle largas para mantenerse en el poder. Porque si hablamos de los aspectos esenciales y fundamentales de la estructura social, donde no han sido capaces de dar respuesta a lo prioritario para el pueblo, es evidente que el fracaso ha sido rotundo, porque la corrupción, la incapacidad y lo atrofiado de la gestión, hacen que estemos en la peor crisis jamás vivida en nuestro país.
Por lo tanto, no podemos desenfocar nuestro reclamo y nuestra lucha para exigir cuentas a este nefasto gobierno y desnudar esta gran farsa llamada revolución. No podemos morder el peine de Nicolás y de sus funcionarios rojos quienes conscientes de la debacle económica, social y moral, pretenden llevarnos al terreno meramente de lo político, en el cual producto de la mentira, del chantaje, de la construcción de magnicidios, invasiones, injerencias extranjeras, pretenden desenfocarnos de lo real y seguir manipulando y engañando.
Hace dos semanas el gobierno estaba pegado contra las cuerdas buscando qué explicación daba al país sobre el crecimiento del dólar paralelo y casi oficial que pisó los 440 bolívares y aun se mantiene sobre la banda de los 400 bolívares, sobre la profundización de los graves problemas de escasez, desabastecimiento, inflación e inseguridad que nos agobian a todos. Fue así como el gobierno buscó propiciar una confrontación entre dirigentes de la oposición y que promovieron a través de los medios de comunicación social, pero se quedaron con los crespos hechos, porque el pueblo salió de manera contundente, pacífica y democráticamente, a reclamar lo que tiene que seguir siendo nuestra unidad de acción, es decir, los graves problemas que tienen azotados al país, la fecha para la realización de las elecciones parlamentarias y la libertad de nuestros presos políticos.
Es cierto que tenemos que dar una lucha sin cuartel por la liberación de nuestros presos políticos y nuestros estudiantes, y por el respeto a los derechos humanos de la disidencia venezolana y que esa tiene que ser una de nuestras tareas fundamentales de lucha y de reivindicación democrática. Sin embargo, tenemos que estar conscientes que en el terreno en el que el gobierno se arrincona, se enmudece, pierde control y no encuentra ninguna explicación qué dar es en el terreno de los grandes problemas sociales por los cuales el país atraviesa.
En Venezuela no es que tiene que darse una polarización política entre la oposición y el gobierno nacional, no, aquí debe darse una repolarización entre los problemas del país y el gobierno inepto, corrupto, ineficiente e incapaz. No obstante, ese tiene que ser el foco fundamental porque en ese terreno nosotros vamos a llevar al gobierno a una derrota absolutamente estruendosa, por lo tanto, siguiendo los caminos que a ellos les convienen, como es la confrontación política, no son precisamente los que nos darán los votos para ganar de manera mayoritaria en la Asamblea Nacional.
Reitero que no podemos desenfocarnos de lo fundamental y prioritario en la actualidad, que es ganar con una mayoría en la nueva Asamblea Nacional, porque entre otras cosas, la llave que abrirá la puerta de la libertad de los presos políticos, es ganar la mayoría en el parlamento. Con esa llave electoral nosotros llegaremos e inmediatamente impulsaremos una Ley de Amnistía para recuperar la libertad y los derechos fundamentales de nuestros dirigentes políticos y estudiantiles, hoy vilipendiados por este gobierno demagogo.
Nuestra lucha debe enfocarse cada día más en sacar a la luz pública las cifras rojas e indignas por las que hoy es reconocida Venezuela. Es decir, hoy somos reconocidos como uno de los países más violentos del mundo, en apenas cinco meses ya pasan de 10 mil los muertos producto del crimen y la violencia a nivel nacional, y frente a esto, el gobierno ha implementado 17 planes que han muerto antes de nacer; Hoy la escasez de los productos básicos, supera el 73%, porque la inflación acumulada en los últimos 16 meses llega a 163%, por qué sigue deteriorándose cada día más el sistema de salud pública, por qué destruyeron programas sociales como Barrio Adentro, entre otros, esos son los temas que el gobierno tiene que responder y allí debe estar fundamentada una parte importante de nuestra lucha.
Tenemos que tener claro que a la gran mayoría de la población, afectada por la escasez, el desabastecimiento, la inseguridad, la inflación, la crisis hospitalaria, no le importa las confrontaciones ni las distracciones que nos pone el gobierno para tapar su ineptitud frente a los graves problemas que hoy vivimos. La gente quiere respuestas inmediatas para salir de este atolladero. Por lo tanto, no podemos dejarnos llevar a ese foco netamente político que pretende el gobierno, nosotros con bases, con denuncias bien argumentadas y con una inmensa mayoría del pueblo como testigos, tenemos que denunciar a Venezuela y el mundo, que este gobierno, nos estafó. Es por ello que ratifico que aquí debe darse es una repolarización entre los graves problemas del país y el gobierno inepto, corrupto e ineficiente que hoy desgobierna en Venezuela.
Ismael García
Diputado a la Asamblea Nacional
Primero Justicia
@ismaelprogreso