Tasha Sturm se desempeña como técnica del laboratorio de microbiología en el Colegio Cabrillo, en Aptos, California. Hace 15 días le pidió a su hijo de ocho años que saliera al jardín de la casa y jugara con el perro de la familia durante unos minutos. Reseñó Infobae
Cuando el pequeño volvió al interior de la casa, Sturn le dijo que colocara la mano derecha sobre una placa de Petri (uno de esos platos que se utilizan en el laboratorio) y que presionara con suavidad.
Luego de que su hijo dejara estampada su huella en ella, Sturm la tapó y la introdujo en un incubador a 37 grados durante un día entero. Y después la dejó a temperatura ambiente.
De acuerdo a lo que publica la BBC, tras una semana, había emergido el dibujo de una pequeña palma humana hecha de lo que parecían “flores de colores”, tal como se pudo apreciar en la fotografía que después compartió en microbeworld.org, un sitio en internet de la Sociedad Estadounidense de Microbiología.
Era la huella inmunológica de su hijo. La prueba gráfica de lo que puede esconder una mano sucia. “Estoy guardando la placa para mostrársela a los estudiantes de microbiología en una semana y media”, escribió Sturn en la página web.
El colorido “jardín” de la palma del niño corresponde a millones de bacterias, asegura la profesora. Lo que sucede es que en el cuerpo humano puede llegar a haber miles de millones de microorganismos ajenos, diez veces más que el número de células propias.
De acuerdo a Sturm, la mayoría de los que se ven en la imagen son bacilos, un grupo de bacterias muy diverso. Las colonias blancas en torno a las huellas dactilares son probablemente estafilococos, las amarillas micrococos y las más rojizas bacterias del género serratia, explicó la experta, quien también tomó fotografías más detalladas de cada una de ellas.
Lo cierto es que la única manera que existe para que esas bacterias desaparezcan es lavándose bien las manos. Sin embargo, Sturm dijo no estar preocupada por que su hijo pueda tener tantos microorganismos en sus manos. “Estar expuesto a estos es parte de un sistema inmunitario saludable”, explicó.