Mitzy Capriles y Lilian Tintori, esposas respectivamente de los opositores venezolanos detenidos Antonio Ledezma y Leopoldo López, pidieron este miércoles en Madrid observadores internacionales para el proceso electoral en su país de aquí a diciembre. AFP.
“Pido que nos ayuden a lograr la observación calificada para la elección del 6 de diciembre”, dijo Tintori, en una rueda de prensa en la que ambas estuvieron acompañados por el exjefe del gobierno español Felipe González.
La esposa de Leopoldo López pidió que “esa observación sea desde ya, porque ya están en campaña (el gobierno venezolano) y ya se están mal utilizando los recursos del Estado” para hacer campaña.
“Si de verdad no tienen miedo del resultado, qué más les da que haya una presencia internacional durante varios meses para ver cómo se procesa todo el tiempo preelectoral y electoral, ¿cuál es la pega?”, añadió por su parte González.
“Tiene que haber un control serio, para que el proceso y el resultado sean respetados y respetables”, añadió.
El exjefe socialista del gobierno español apoyó la petición de Tintori y Capriles de que la Unasur, la OEA y la Unión Europea observen el proceso para las elecciones parlamentarias convocadas para el 6 de diciembre.
Los tres volvieron a solicitar la liberación de López y Ledezma, y de los, según ellas, otros 73 presos políticos que están en las cárceles venezolanas.
“Los tienen que liberar”, dijo Tintori, que relató los casos del líder estudiantil Renzo Pietro, o de Gilberto Sojo. Su esposo, Leopoldo López, mantuvo una huelga de hambre que “decidió levantar porque dieron la fecha de la elección parlamentaria”.
López está acusado de incitar a la violencia en las masivas protestas de principios de 2014 contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, que dejaron 43 muertos, mientras que el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, fue detenido el 19 de febrero pasado acusado de presuntos delitos de conspiración.
Capriles y Tintori, que llegaron a España procedentes de Suiza, donde el martes estuvieron en la ONU, se reunieron durante la jornada con el exjefe conesrvador del gobierno español José María Aznar, así como con la alcadesa de Madrid, Manuela Carmena, y la presidenta regional de Madrid, Cristina Cifuentes.
Capriles también afirmó que solicitaron reunirse con el partido de izquierda radical español Podemos, pero que “por razones de agenda no era posible una reunión”.
“Ya sabemos su modo de pensar. Lamentamos realmente no haber sido recibidos”, añadió Capriles, en referencia al partido antiliberal español.
González opinó que la situación venezolana puede ser un problema incluso para su tradicional aliado cubano, inmerso en la normalización de relaciones con Estados Unidos.
“Yo estoy seguro de que para Cuba hoy, el comportamiento del gobierno (venezolano), el deterioro de la democracia, es mucho más un problema que una ayuda”, afirmó.