Hay que “peregrinar” para retirar efectivo de los cajeros automáticos. Así lo afirman los usuarios que visitan hasta 10 puntos en un día hasta encontrar uno que funcione correctamente. Gustavo Machado, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de LUZ, atribuye esta situación a la “falta de actualización de la familia de billetes y monedas por parte del Banco Central de Venezuela”, según lo reseña laverdad.com
Por Alixel Cabrera
Las trabas tienen distintas presentaciones, desde la inoperatividad de las máquinas hasta un corto límite en la cantidad de dinero que puede ofrecer el cajero. Aracelys Montiel, profesora, afirma que las colas son recurrentes: “Si sirve uno, no sirve el otro y de repente el que sirve deja de servir, entonces haces colas y colas y uno tiene que vivir peregrinando de sitio en sitio para poder sacar lo que va a sacar”.
En algunas entidades bancarias, si se realizan tres transacciones de cuatro mil bolívares, se puede llegar a obtener 12 mil bolívares. En otras el monto descendió entre ocho mil y 600 bolívares. A esto se le suma que algunos bancos sólo permitan la extracción de dinero por parte de sus clientes.
“Es fatal y cuando se atraviesa un día feriado que agarre el fin de semana se pone peor. Si es de otro banco no te dan nada, tiene que ser del mismo banco y si funciona, funciona un solo cajero”, explica María Alonso, contador público, mientras espera su turno para llegar a la segunda taquilla a la que acudió en la mañana.
El economista asegura que este escenario es una consecuencia de la inflación y la desactualización de la familia de billetes y monedas: “El BCV para resolver este problema operativo, tiene que colocar en el mercado denominaciones superiores, ya no sólo una de 500, sino otra de mil”.
Problema efectivo
A pesar de que Bank of America pronostique una inflación de 172 por ciento para el cierre de año, persiste la negativa del BCV de introducir un billete de 500 bolívares. Machado explica que junto al aumento de precios, crece el requerimiento de más billetes para ejecutar cualquier transacción.
Las dificultades también se presentan con la cantidad de billetes de menor denominación que los usuarios pueden retirar: “A veces conseguimos billetes de 100 o de 50, como también conseguimos a veces de 10, entonces hay que poner un monto menor para que puedan salir, sino se tranca el cajero”, comenta Gerardo Quintero, técnico en balsas, quien buscaba retirar efectivo pues experimenta dificultades con su tarjeta en algunos comercios.
Gustavo Machado asegura que los billetes de baja denominación no se utilizan con frecuencia para comprar bienes diferentes a los productos subsidiados como la gasolina: “Si la idea es comprar otro bien o pagar otro servicio, estas denominaciones resultan insuficientes”.