El objeto metálico encontrado hoy en la costa de la isla francesa de La Reunión ha sido entregado a la Gendarmería para verificar si pertenece al avión de Malaysia Airlines que desapareció sin dejar rastro en marzo de 2014.
Su hallazgo se produce cuatro días después de que en otra playa de esa isla de ultramar, en el océano Índico, se hallara un fragmento de ala que ya ha sido trasladado a la Francia continental para examinarlo.
Los medios locales “Linfo.re” y “clicanoo.re” indicaron que ese nuevo objeto, con ideogramas en chino y una especie de mango de cuero, fue descubierto por un paseante, que advirtió a la policía y ésta a su vez a la sección de investigación de la Gendarmería de Transporte Aéreo (SRGTA), encargada de las pesquisas.
Según las fuentes, los investigadores no se han pronunciado sobre la procedencia y la naturaleza de esa pequeña pieza, y nada indica por el momento que esté vinculada con el avión y con la descubierta días antes, cuyo peritaje comenzará el miércoles en un laboratorio en Toulouse dependiente del Ministerio galo de Defensa.
Además, también en La Reunión se localizó el jueves una maleta muy deteriorada, de cuyo análisis se encargará, a las afueras de París, el Instituto de Investigación Criminal de la Gendarmería Nacional francesa (IRCGN).
Expertos malasios y franceses, junto a un equipo técnico del fabricante estadounidense Boeing, van a participar en la investigación, precedida este lunes en París de una reunión de trabajo a puerta cerrada.
El enigma en torno al vuelo MH370 recobró protagonismo esta semana con esa sucesión de hallazgos, tras 16 meses sin pistas de peso.
Desde el primero de esos descubrimientos, según fuentes de la investigación citadas por la cadena “BFM TV”, se ha desatado una especie de “caza de tesoros” en la isla con la esperanza de hallar otros nuevos vinculados con la catástrofe.
El Boeing 777 de la aerolínea malasia desapareció el 8 de marzo de 2014 tras cambiar de rumbo en una “acción deliberada”, según los expertos, con 239 personas a bordo, de las cuales 153 eran chinas.
La investigación de la Fiscalía de París contempla los cargos de homicidio involuntario y presunta destrucción intencionada de ese aparato, al que se le perdió el rastro 40 minutos después de su despegue de Kuala Lumpur y de que alguien apagara los sistemas de comunicación.
En homenaje a las víctimas de ese vuelo se celebró ayer una misa en La Reunión, cerca de la playa en la que apareció el fragmento de ala y a la que acudieron unas 400 personas. EFE
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