Al menos 15 personas murieron y 240 resultaron heridas, todas ellas civiles, en la explosión hoy de un camión bomba en Kabul que destruyó varios edificios residenciales cerca de un complejo militar y que el Gobierno afgano atribuyó a los talibanes, informaron fuentes oficiales. EFE.
La explosión se produjo hacia la 01.00 hora local del viernes (20.30 GMT del jueves) en la zona de Shashahid, en el este de la capital afgana.
“Entre los heridos hay 47 mujeres y 33 niños”, dijo en rueda de prensa en la capital afgana Sayd Zafar Hashimi, portavoz adjunto de la oficina del presidente de Afganistán, Ashraf Gani,
Hashimi afirmó que el número de víctimas podría aumentar y que entre 35 y 40 personas tendrán que permanecer hospitalizadas, mientras que el resto fueron dadas de alta tras ser atendidas.
El portavoz calificó la explosión como “un cobarde ataque terrorista contra civiles, con el objetivo de desviar la atención pública de las grietas y desavenencias creadas entre el liderazgo del grupo talibán”, en referencia a las divergencias en la sucesión del fallecido líder insurgente mulá Omar.
El portavoz de los talibanes afganos, Zabihullah Mujahid, sin embargo, declaró a Efe que “a veces algunos ataques son sospechosos” y el grupo insurgente desconoce “qué ocurrió”, por lo que necesita “un tiempo para investigarlo” y no dará más detalles hasta disponer de “información completa”.
Residentes de la zona manifestaron a Efe que el número de víctimas podría ser mayor, ya que la explosión destruyó varios edificios en los que viven de alquiler trabajadores y estudiantes que se temen que quedaron atrapados entre los escombros.
Sin embargo, de un complejo militar cercano solo se vio afectado el muro exterior, relató un testigo presencial, Mansour Faizi.
La Policía y equipos de emergencias acudieron al lugar de la explosión, que no ha sido reivindicada por ningún grupo insurgente y que ha sido condenada por las misiones de Naciones Unidas (UNAMA) y de la OTAN en el país asiático.
El jueves, 16 personas murieron y 22 resultaron heridas en ataques talibanes contra comisarías de Policía en Afganistán, los primeros de este tipo cometidos por los insurgentes tras el anuncio de la muerte hace dos años del líder talibán mulá Omar y el nombramiento del nuevo jefe, Ajtar Mansur.
La violencia en Afganistán continúa ensañándose con mujeres y niños con un 23 % y un 13 % más de víctimas entre estos dos grupos de población durante el primer semestre del año, de acuerdo con UNAMA.