El arzobispo de Coro, monseñor Roberto Lückert, dijo que el gobierno venezolano atropella los derechos humanos de los ciudadanos colombianos que están siendo deportados, luego que se anunciara el estado de excepción y cierre de la frontera con Colombia.
“Me parece una barbaridad lo que están haciendo (…) Les rompen las casas, les roban, los sacan como unos animales a la frontera. Tenemos que reclamar, eso no puede continuar”, expresó el monseñor.
“La presencia de los hermanos colombianos en Venezuela no es de ahora, sino que ambos pueblos conviven desde hace muchos años, trasladándose a ambos lados de la frontera”, agregó.
En declaraciones a ACI Prensa, recordó que en el también estado fronterizo de Zulia, la industria agropecuaria ha florecido gracias a la contribución de los colombianos que trabajan en el campo, como mecánicos, electricistas y en otras actividades.
“Si en este momento todos los colombianos del estado de Zulia deciden irse a Colombia, le creamos un gravísimo problema a Colombia porque no tiene a dónde acomodarlos, y si se van nos hacen un gravísimo problema a nosotros los venezolanos porque ellos han trabajado y siguen trabajando y han constituido familias de tres, cuatro generaciones en nuestro estado”, indicó en un comunicado publicado por la Conferencia Episcopal Venezolana.
Vía El Nacional