Comercios en la isla de Margarita continúan con largas colas de personas para comprar algún productos de la cesta básica, publica El Sol de Margarita.
La escasez de productos de higiene personal y alimentos en general es la causa principal que lleva a las personas a mantenerse durante varias horas a las puertas de los establecimientos de la entidad con la esperanza de retornar a casa con algún rubro en la mano.
Un promedio de cuatro horas diarias es lo mínimo que puede pasar un individuo para conseguir productos de cualquier tipo.
Durante un recorrido por diferentes abastos, supermercados y farmacias en el estado Nueva Esparta, se pudo observar que la posesión de máquinas captahuellas en los comercios complica la espera para que consumidores puedan comprar.
Ana Rosa Aguilera relató la odisea que debe sufrir para obtener algún artículo. “Pasamos mucho trabajo para conseguir cualquier producto. No es justo que sean las 11 de la mañana y uno esté aquí antes de las siete y lo único que se lleve sean dos paquetes de harina y champú”, señaló.
Sin embargo, cuando la Superintendencia de Precios Justos arrancó con la instalación de captahuellas en los comercios, dijo que la intención era cuidar los inventarios de las cadenas de comercialización para evitar que revendedores se llevaran los productos y los colocaran en el mercado informal en abierta especulación. El fin era que hubiera mayor abastecimiento de toda la cesta básica.
Pero los consumidores comentaron que esa medida no ha servido de nada, porque todavía sigue presente la escasez de productos en la región insular, así como en el resto del país.