Corea del Norte evocó este lunes la posibilidad de un próximo lanzamiento de un satélite, lo que relanzó las especulaciones sobre un intento de tiro de cohete de largo alcance, el mes próximo coincidiendo con una celebración política.
AFP
Desde Seúl se calificó una provocación “grave”, este futuro lanzamiento.
Todo lanzamiento de ese tipo conllevaría nuevas sanciones internacionales y haría peligrar una reunión, prevista con Corea del Sur, de familias separadas por la guerra de Corea (1950-1953).
El Norte insiste en que esos lanzamientos de cohetes están destinados a poner en órbita satélites de uso no militar, mientras que Estados Unidos y sus aliados los ven como unos tests disimulados de misiles balísticos.
En una entrevista de la agencia oficial KCNA, el director de la agencia espacial norcoreana declaró que Pyongyang ha llegado a la “fase final” del desarrollo de un nuevo satélite geoestacionario.
“El mundo verá volar muy claramente una serie de satélites (…) al cielo el día y el lugar determinados por el comité central” del Partido de los Trabajadores en el poder, dijo el responsable, citado por la agencia.
El desarrollo de la exploración espacial es un derecho soberano que Corea del Norte va a ejercer “sea cual sea la opinión de los demás al respecto”, añadió.
El director no mencionó fecha precisa, pero los observadores estiman posible un lanzamiento de satélite por el Norte para celebrar el 70º aniversario de la creación del Partido de los Trabajadores, el próximo 10 de octubre.
Imágenes satélite recientes muestran que Corea del Norte modernizó su principal complejo de lanzamiento de satélites, en Sohae.
Expertos del Instituto americano-coreano de la Universidad Johns Hopkins estiman que el complejo de Sohae puede acoger ahora cohetes de 50 metros, un 70% más largos que el Unha-3 mandado al espacio por el Norte en diciembre de 2012.
No obstante, los mismos expertos consideran que en las imágenes de satélite no se observa ninguna actividad que sugiera un lanzamiento inminente.
Corea del Norte tiene prohibido por resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU todo lanzamiento que utilice la tecnología de los misiles balísticos, aunque ha efectuado varios ensayos de misiles de corto alcance sin ser sancionada.
El lanzamiento del cohete Unha-3 hace tres años fue castigado con nuevas sanciones al país y agravó las tensiones militares, que culminaron tres meses más tarde cuando Corea del Norte realizó su tercer ensayo nuclear.
Preguntado sobre las declaraciones procedentes de Corea del Norte, un portavoz del Departamento de Estado norteamericano declaró que cualquier lanzamiento de satélite por el Norte que utilice la tecnología de los misiles balísticos será una “violación evidente” de las resoluciones del Consejo de Seguridad.
Si Corea del Norte efectúa un lanzamiento alrededor del 10 octubre, saboteará casi con certeza una cita de familias del Norte y del Sur, separadas desde la guerra, prevista del 20 al 26 de octubre.
La decisión de organizar esas reuniones familiares forma parte de los acuerdos suscritos el mes pasado entre el Norte y el Sur después de las tensiones fronterizas que casi abocaron a un nuevo conflicto abiertos entre los dos países.