El primer ministro italiano, Matteo Renzi, afirmó hoy que Italia está dispuesta a abrir centros de registro de refugiados, pero sostuvo que toda Europa debe asumir responsabilidades para solventar la crisis migratoria.
EFE
“Italia está preparada para hacer lo que le corresponde en cuanto a la política europea de gestión de la inmigración”, afirmó Renzi.
“Italia reitera su disponibilidad a crear centros de registro de refugiados y gestionarlos, junto con un acercamiento global que incluya políticas de admisión y de distribución equitativa de aquellos que llegan a territorio europeo”, agregó.
En estos términos se expresó hoy Renzi durante la rueda de prensa que ofreció de forma conjunta con el presidente francés, François Hollande, de visita en Italia y con el que trató el problema de crisis migratoria en Europa.
El mandatario francés fue recibido por Renzi en torno a las 20.00 hora local (18.00 GMT) en el patio del Palazzo Ducale, sede de la Academia Militar de Módena (norte de Italia).
Durante su comparecencia ante los medios, el jefe del Gobierno italiano reiteró la disponibilidad del país a crear estos centros, tal y como pidieron en agosto la canciller alemana, Angela Merkel, y el propio Hollande, tanto a Italia como a Grecia.
Renzi volvió a incidir en el mensaje que ya lanzó esta mañana tras la reunión con el primer ministro de Luxemburgo, Xavier Bettel, actualmente presidente de turno del Consejo de la Unión Europea (UE).
“Europa nació para derribar muros y no para construirlos, y lo reiteraré el miércoles en la reunión extraordinaria de líderes de la UE. Si actualmente hay países que forman parte de la Unión Europea es porque alguno derribó muros y dio bienestar, libertad y futuro”, manifestó.
Por su parte, el presidente francés anunció que en la cumbre extraordinaria sobre inmigración del 23 de septiembre, la UE deberá tomar decisiones concretas.
En este sentido, Hollande afirmó que es fundamental la creación de estos centros de registro de refugiados “para facilitar a la gente que llega a Europa los medios para quedarse”, pero también “acompañar con respeto a aquellos que no tienen derecho de asilo”.