Gennady Golovkin lo hizo de nuevo y noqueó a David Lemieux; retuvo su corona de súper campeón 160 libras de la Asociación Mundial de Boxeo y además conquistó el título de la FIB la noche del sábado en el Madison Square Garden de Nueva York lleno con 20.548 personas.
Con el triunfo extendió su invicto a 34-0 con 31 KO, de ellos 21 rivales eliminados de forma consecutiva antes del límite y defendió por décimo cuarta vez su cinturón AMB, mientras que la interina del CMB lo hizo por tercera ocasión.
El kazajo demostró que además de tener poder en sus puños, puede boxear haciendo alarde durante toda la noche de un impecable jab que mantuvo a raya al canadiense. A pesar de eso, Lemieux (34-3, 31 KO) siempre insistió en buscar la pelea en la distancia corta, pero después de dar un golpe recibía un duro castigo que lo hacía retroceder.
“Él es un gran boxeador, es muy fuerte pero yo demostré que no solo sé pegar, sino que también sé boxear”, comentó el súper campeón después la contundente victoria.
Golovkin solo necesitó de siete actos, en los cuales siempre llevó el control, iniciativa y además la mejor parte para mantenerse arriba en las tarjetas, pero resolvió antes del límite después que Lemieux quedara arrinconado en las cuerdas y recibiera un aluvión de golpes que no pudo responder. Cuando el reloj marcaba 1:28 para finalizar el octavo asalto, el árbitro Steve Willis detuvo las acciones.
De inmediato, ante la pregunta de cuál es el próximo paso y rival, el kazajo con tranquilidad dijo que está listo para enfrentarse al ganador del combate entre Miguel Cotto vs. Saúl “Canelo” Álvarez, “sea quien sea el ganador, estoy listo”.
Sin embargo, Golovkin y su equipo aseguraron que de no conseguir esa pelea entonces pueden ir por el ganador de otras dos: Lee-Saunders o Jacobs-Quillin “quiero todos los cinturones de las 160 libras. Después de conseguirlos veremos sí subiré de categoría”, comentó el monarca.
En relación a la pelea, su entrenador Abel Sánchez dijo que se sintió satisfecho por el trabajo realizado por su pupilo, pero también aseveró “Lemieux fue el primer contrario que resultó un verdadero reto mental para Golovkin. Por lo que realmente pudo demostrar de lo que es capaz de hacer”, finalizó.