El célebre protagonista de la saga, Michael J. Fox, ha estado en boca de todo el mundo durante los últimos días. Sin embargo, la expectativa fue mucho mayor este miércoles, cuando finalmente llegamos a la fecha en la que aterrizó Marty McFly, el protagonista, en la segunda parte de “Volver al futuro”.
Para quienes han estado esperando un pronunciamiento de Fox, este llegó a través de un blog en el sitio web de la Casa Blanca. Allí reflexiona acerca de una enfermedad que forma parte de su vida desde 1991, cuando le fue detectada: el Parkinson y cuán lejos ha llegado la ciencia en la búsqueda de una cura para las enfermedades del cerebro. “Hemos recorrido un largo camino desde 1985”, afirma el actor, quien también es un activista en esta materia.
Agrega que cuando Marty McFly y Doc Brown viajaron treinta años en el futuro, sólo se podían imaginar las innovaciones que hoy damos por sentadas- “nuevas ideas y tecnologías que han cambiado por completo la forma en que vivimos, aprendemos y trabajamos”.
En aquel entonces, asevera el actor, si le hubieran dicho si le gustaría hablar por un teléfono celular acerca de biología celular, no lo hubiera creído. Hoy en día, La Fundación Michael J. Fox está ayudando a liderar colaboraciones de investigación para acelerar un futuro en el que en el que se pueda tratar, curar e incluso prevenir enfermedades del cerebro como el Parkinson.
“Entonces, ¿Qué es posible en otros 30 años? Llámenme optimista, pero creo que en 2045 vamos a encontrar las curas que buscamos – en especial, debido a todas las personas inteligentes, apasionadas que trabajan para que eso ocurra. Los médicos e investigadores de todo el mundo desarrollan nuevas herramientas para mejorar el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades cerebrales, para adaptar los tratamientos – para todas las enfermedades – a través de la medicina de precisión, y para mejorar la vida de millones de personas. Esto realmente es el material del futuro”, según Fox.
Hoy, en el “Día de Volver al futuro” Fox reta a imaginar un mundo para vivir en treinta años. Asevera que la Casa Blanca está organizando una serie de conversaciones en línea con los innovadores de los Estados Unidos durante todo el día.
Es consciente de que no todos podrán ser científicos del cerebro, pero cree que todos podrán participar. “Una de las razones para que las investigaciones sobre el Parkinson hayan llegado tan lejos en los últimos 15 años es que las personas y familias que viven con la enfermedad han crecido como defensores e innovadores de sí mismos, trabajando para construir el futuro que todos queremos”, según el activista.
Su blog concluye afirmando que con la unión de fuerzas se hará de esta enfermedad neurológica una cosa del pasado y que si finalmente se crean y comercializan las famosas patinetas que vuelan -y que se hicieron famosas en todo el mundo a raíz de la película- será algo así como un “bono extra”.