Existen dos posibles realidades a esta situación que vivió la “primera combatiente”, Cilia Flores, la noche de este jueves durante la re inauguración del Teatro de la Ópera de Maracay.
En principio creemos que Flores, acostumbrada a ser la bandera del “red fashion”, decidió estrenar una nueva chaqueta a rayas con la mala suerte de toparse con una parranda de mimos con una vestimenta igualita, lo que sería una mala mimosuerte.
La otra posibilidad es que Nicolás no entendiera a esa parranda de gente gesticulando sin pronunciar una sola palabra y ella tratara de ayudarle colocándose el mismo atuendo.
El primer mandatario nacional reveló este jueves que se le iba a fundir el poco cerebro que le quedaba… todo es posible.
¡Mimos, mimos, mimos everywhere!
Lo cierto es que quedan estas fotos de la agencia AVN para el recuerdo y el debate.
