Una niña de 12 años, le confesó a su madre que estaba embarazada, la señora no lo podía creer a tan corta edad, apenas comenzando su adolescencia, El Impulso.
La dama se sentó a conversar con ella y le pidió que confiara en ella que era su madre, que le tuviera confianza, y la niña habló. Le contó a su madre que había sido violada y el sujeto que hizo esto era su padrastro, quien sería el padre de la criatura.
La madre se fue con la niña para el Pediátrico Agustín Zubillaga. Posterior al protocolo médico y por presentar riesgos en el embarazo, se tuvo que interrumpir el mismo.
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