La Unasur instó a aceptar los resultados de las elecciones legislativas del 6 de diciembre en Venezuela al iniciar este miércoles, por solicitud de las autoridades, una misión de acompañamiento frente a la cual la oposición se declaró escéptica.
AFP
El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, y el expresidente dominicano y jefe de la misión, Leonel Fernández, se reunieron con dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Tras esos encuentros, Fernández llamó a respetar los resultados de los comicios en que serán elegidos 167 diputados de una Asamblea unicameral controlada por el chavismo desde que llegó al poder hace 16 años.
Según varias encuestas, esa hegemonía podría llegar a su fin pues la oposición lidera la intención de voto con una diferencia de 14 a 35 puntos en medio de una fuerte crisis económica y baja popularidad del presidente Nicolás Maduro, quien asegura tener un voto “duro” de 40%.
El exmandatario dominicano exhortó a “actuar con madurez” cualquiera que sea el resultado.
“Lo que hay que entender es que el triunfo no es definitivo y la derrota permanente, y por tanto todo se recicla inmediatamente a futuro”, señaló en entrevista con el canal Globovisión.
La misión propuso un acuerdo en el que los partidos se comprometan a respetar los resultados, dijo tras la cita el jefe de campaña del PSUV, Jorge Rodríguez, quien anunció que ese partido firmará el documento.
Un pacto similar planteado por Maduro ya había sido rechazado por la MUD, que denuncia la parcialización del Consejo Nacional Electoral (CNE) y maniobras del gobierno para favorecer a sus candidatos.
“Nos preocupa que la intención de la derecha es no reconocer los resultados electorales”, dijo Rodríguez.
El jefe de la misión destacó la “gran ventaja técnica” que ofrece el sistema electoral venezolano, al incluir al mismo tiempo el voto electrónico y manual.
“Tiene que haber necesariamente una convergencia entre lo que figura en la urna como voto físico y el resultado electrónico”, subrayó.
Pero esos argumentos no disipan los temores de la oposición, que se declaró escéptica tras el encuentro en que expuso a Samper y Fernández las irregularidades que a su juicio existen de cara a los comicios.
“No condenamos a priori, pero somos profundamente escépticos ante el perfil de esa misión”, dijo a la AFP el secretario general de la MUD, Jesús Torrealba.
“No le damos ni siquiera el mérito de la duda, debe demostrar con hechos que tiene un comportamiento profesional”, añadió.
La MUD exigía una veeduría de la Unión Europea (UE) y la Organización de Estados Americanos, cuyo secretario general Luis Almagro afirmó la semana pasada que las condiciones “no están en estos momentos garantizadas al nivel de transparencia y justicia electoral”. El CNE no aprobó esa solicitud.
“Uno tiene una representación en la OEA y participa de sus mecanismos institucionales, a veces está de acuerdo, a veces no, y eso no es nada alarmante ni significa que si ellos no están el proceso va a colapsar”, zanjó Fernández.
Según Torrealba, las “evidencias” entregadas a la misión demuestran que “la situación es peor que en cualquier otro momento”.
“Ya no se trata de ventajismo estructural, sino que este se militarizó con las zonas de excepción”, indicó el dirigente aludiendo a 24 municipios fronterizos con Colombia que permanecen bajo estado de excepción desde agosto, según el gobierno para combatir el contrabando y el crimen organizado.
En esas jurisdicciones está restringido el derecho de reunión.
“Lo que antes eran irregularidades, ahora son hechos punibles como la tarjeta electoral”, sostuvo el directivo sobre la inclusión en esa boleta de un logotipo similar al de la MUD para “generar confusión entre los electores”.
La oposición también denunció ante la comitiva -que desplegará medio centenar de técnicos- “niveles increíbles de corrupción” en el uso de recursos públicos para la campaña chavista.
Fernández manifestó haber tomado nota de esos reclamos para trasladarlos al CNE, al que entregará un informe de su gestión.
“Sobre la marcha se puede corregir, haciendo observación, llamando la atención al CNE y tomarse los correctivos”, sostuvo.