Las cestas navideñas rellenas de galletas, jamón planchado, panettone, turrones ¡y hasta ponche crema! quedaron para el recuerdo. Ahora con varios rollos de papel toilet, aceite y afeitadoras, los jefes del TSJ resuelven para sus empleados.
Si bien los últimos son artículos preciados y escasos, el esfuerzo de todo un año debería ser bien recompensado con artículos que reflejen las fiestas y el aguante, aunque al parecer ya no es necesario.
El “obsequio” genera indignación entre los empleados del tribunal.
¿Faltará dinero o es que no les importa regalar lo que sea?
Trabajador indignado del TSJ me manda cesta de Navidad. De turrón pasamos a pañales, de avellanas a afeitadoras! pic.twitter.com/E1S2Ps5wId
— manuela bolivar (@manuelabolivar) diciembre 4, 2015