El presidente Barack Obama dijo este sábado que Estados Unidos no se dejará “aterrorizar”, mientras el grupo Estado Islámico elogió como “soldados” de su califato a la pareja que masacró a tiros a 14 personas en California.
AFP
“Es muy posible que esos dos atacantes se hayan radicalizado para cometer un acto de terror”, afirmó en su mensaje semanal Obama sobre Syed Farook y su esposa pakistaní Tashfeen Malik, quienes asaltaron a tiros el miércoles un centro para discapacitados la ciudad de San Bernardino.
Tras dejar además 21 heridos, Farook, de 28 años, y Malik (29) fueron abatidos en un enfrentamiento con la policía.
Aunque los altos mandos de seguridad, quienes se reunieron con Obama, le indicaron que había evidencia de que la pareja se había radicalizado, por ahora nada indica que “formaran parte de un grupo organizado o de una célula terrorista”, indicó este sábado la Casa Blanca en un comunicado.
“Somos estadounidenses. Defendemos nuestros valores de una sociedad abierta y libre. Somos fuertes. Somos resistentes y no nos dejaremos aterrorizar”, expresó antes Obama en su mensaje semanal difundido por la Casa Blanca.
El presidente francés, François Hollande, habló por teléfono con el presidente estadounidense para manifestarle “la solidaridad” de Francia tras la matanza en California, y ambos gobernantes reafirmaron su voluntad de, “ante una amenaza común, hacer un frente común entre aliados”, indicó el Elíseo.
Según los investigadores del FBI, el tiroteo del miércoles en San Bernardino, a una hora en auto de Los Ángeles, fue minuciosamente preparado.
“Soldados del califato”
En un mensaje radial emitido el sábado en inglés, la agrupación EI, sin atribuirse explícitamente el ataque, se refirió a los atacantes como “soldados del califato” y mártires que “murieron en el camino de Alá”.
En otra emisión en árabe difundida más temprano, el grupo yihadista se refirió a los atacantes simplemente como “partidarios del Estado Islámico”.
El ataque en San Bernadino, el peor en los últimos tres años registrado en el país, ha reavivado de nuevo el debate sobre el control de armas en el país, donde este tipo de matanzas son cada vez más frecuentes.
“Si eres muy peligroso para volar en un avión, también eres peligroso, por definición, para comprar un arma”, sostuvo Obama al criticar que personas que tienen vetado viajar por vía aérea, puedan comprar armas. “Es descabellado”, afirmó.
Los investigadores encontraron en la vivienda de Farook y Malik un gran arsenal de armas, municiones y explosivos, dos teléfonos celulares destruidos en una papelera y evidencias de que habían intentado eliminar su historial de navegación por internet.
El diario The New York Times se sumó a las críticas del mandatario con un editorial en portada por primera vez desde la década de 1920 para instar al control de armas tras el tiroteo en San Bernardino.
Titulado “Fin a la epidemia de armas en Estados Unidos”, el diario arremete contra los políticos y afirma que ciertos tipos de armas y municiones deben ser prohibidas a los civiles.
“Es un ultraje moral y una desgracia nacional que los civiles puedan comprar legalmente armas diseñadas específicamente para matar gente con velocidad y eficiencia brutales”, indica el artículo.
Las autoridades indicaron que los dos rifles usados por la pareja fueron comprados legalmente, pero observaron que fueron alterados para que fueran más poderosos.
Una estudiante brillante
El FBI confirmó el viernes que investigaba como “un acto terrorista” la matanza perpetrada por el matrimonio, en medio de informaciones que apuntan a que la mujer había manifestado en Facebook su lealtad al grupo EI.
La pareja, que realizó el ataque durante la fiesta navideña de la empresa en que trabajaba Farook en San Bernardino, se conoció por internet en 2013 y se casó un año más tarde en Arabia Saudita, donde vivía la mujer, nacida en Pakistán.
En Pakistán, el exdecano de farmacia de la Universidad Bahauddin Zakariya, Khalid Janbaz, describió a Malik como una “estudiante brillante”.
La estudiante paquistaní Abdia Rani explicó a la AFP que Malik “se volcó poco a poco hacia la religión” y se puso cada vez más seria y discreta.
“Pero nosotros jamás nos imaginamos que ella tenía vínculos con extremistas o que fuera una extremista”, indicó Rani.
A la par, un funcionario de defensa estadounidenses confirmó que el hermano de Farook era un veterano de la Marina, quien ganó medallas por su servicio durante la “guerra contra el terror” de Estados Unidos.