La crisis económica de Venezuela ha puesto en jaque el sostenimiento de la educación privada, toda vez que los precios actuales han superado con creces costos presupuestados para el año escolar, calculados en 2015, publica Correo del Caroní.
Así lo ratificó la profesora Nancy Gómez, presidenta de la Asociación Nacional de Institutos Educativos Privados (Andiep), alertando que la crisis afectará en mayor medida a planteles privados pequeños “porque va a llegar un momento que no van a poder pagar los costos y los colegios grandes se verán en la necesidad de disminuir servicios”.
Informó que el colegio Integral Guayana, de Puerto Ordaz, trabajará hasta este año escolar debido a los altos costos y que esto se está presentando en todas las ciudades del país, aunque no han totalizado cifras locales o nacionales de esta tendencia.
El aumento de precios de mantenimiento de planta física, costos operativos, bienes consumibles, entre otros gastos, “están muy costosos, esos aumentos no se pudieron presupuestar (…) lo otro es que muchos proveedores no quieren dar factura por la misma escasez, te ponen en ‘o lo tomas o lo dejas’ y para nosotros es muy difícil”, resaltó la vocera de los institutos privados a nivel nacional.
Ejemplificó que en 2015 los colegios lidiaron con cuatro aumentos de sueldo mínimo lo cual conllevó al replanteo de la tabla de salarios y el respectivo reordenamiento del presupuesto.
Poco poder adquisitivo
La única solución para poder mantener los costos de las instituciones educativas es subir la mensualidad de los colegios. Sin embargo, Gómez reconoce que eso es, por los momentos, inviable para los padres y representantes, sobre todo si tienen más de un niño recibiendo educación privada.
“Los padres consideran que una mensualidad de 4.500 bolívares es costosa, pero si lo divides por 30 son apenas 150 bolívares al día. El día de una educación de calidad sale más barato que un café”, recuerda Gómez.
Además del precario poder adquisitivo, los colegios enfrentan otro obstáculo: la morosidad. Según Gómez, a nivel nacional el índice de retraso en el pago de las mensualidades es del 20 por ciento de la matrícula, empero, “no es que deben un solo mes, sino que pueden ser cinco o seis meses, y tú no le puedes negar la entrada a un estudiante” por falta de pago.
Soluciones
Según las previsiones de Andiep, este periodo académico será “un año escolar conflictivo”, mientras las directivas continúan haciendo malabares para costear mantenimiento de aires acondicionados, equipos informáticos, servicios básicos, papelería y otros insumos.
La escasez de productos alimenticios golpea las cantinas escolares, que generalmente son cedidas en concesión a empresas privadas que por convenio deben vender un poco más económico que los comercios regulares. Esto se les hace imposible debido a que deben obtener los insumos a precio de reventa.
“Una de las soluciones que voy a proponer como presidenta de la asociación (Andiep) al Ministerio de Educación, es que se dé la facilidad a los colegios de comprar los productos a precios regulados”, no solo de alimentos sino de insumos básicos como papel tualé, cuyo costo por compra al mayor aumenta mensualmente.
La recomendación de Andiep para el inicio del año escolar fue de “pedir financiamiento bancario y comprar inventario para cinco-seis meses, pero no todas las instituciones pudieron hacerlo” y varias corren el riesgo de cerrar sus puertas.
Vale resaltar que la educación privada es necesaria en Venezuela, toda vez que desahoga el gran déficit de instituciones educativas públicas que, aparte de insuficientes, subsisten con infraestructuras precarias.
Andiep espera poder reunirse con el Ministerio de Educación para cerrar convenios con el Estado que garanticen el abastecimiento de los colegios privados y su sostenimiento en medio de un panorama de hiperinflación.