Poco es el despacho de rubros regulados que, al parecer, reciben los supermercado de la zona norte del estado Anzoátegui desde inicios de este año. Los consumidores aseguran que ahora compran menos productos y hacen más colas, publica El Tiempo.
“Tardé tres horas afuera de la tienda Limpiatodo, ubicada en la calle Sucre de Puerto La Cruz, para comprar una bolsa de detergente de 2,7 kilogramos. Por ella pagué Bs 90”.
Así explicó el ama de casa Yudith Moreno cómo están las ventas de productos regulados en la entidad.
Ella contó que hace dos semanas pudo adquirir pollo, carne y arroz en el Abasto Bicentenario que está en la avenida Intercomunal Jorge Rodríguez. Aseguró que es la única vez que ha podido adquirir más de un alimento el mismo día y en un solo expendio.
Dijo que estuvo en la cola desde las 4:00 de la madrugada hasta las 10:00 de la mañana y por su compra pagó Bs 630.
La merma en el despacho de productos fue confirmada por un empleado del supermercado Unicasa de la avenida Bolívar de Puerto La Cruz, quien no quiso identificarse, y aseguró que la cantidad que ha llegado es menor que la recibida antes de las elecciones parlamentarias.
Aseveró que en diciembre los consumidores pudieron comprar en un día pollo, leche, arroz, harina, azúcar y café, pero ahora lo que más han recibido en un día ha sido arroz y salsa de tomate.
Andrea González compró el pasado jueves en el Central Madeirense de Puerto La Cruz cuatro kilogramos de pasta, dos de la larga y dos de la corta.
“Pagué Bs 60 y estuve en la cola desde las 11:00 de la mañana hasta la 1:00 de la tarde”.
Ella había comprado a tempranas horas del día una bolsa de detergente de 2,7 kilogramos en la tienda Limpiatodo que está entre las calles Maneiro y Libertad. Allí esperó tres horas para ingresar al local.
Hacen maromas
Un trabajador del Abasto Bicentenario que está en el centro comercial Judibana de Puerto La Cruz contó que los clientes hacen colas afuera del expendio desde la noche anterior, cuando se enteran de que llegará más de un producto. Pero antes de las 11:00 de la mañana los rubros comienzan a agotarse.
“La gente se molesta y cree que estamos escondiendo los productos, pero es que ahora el despacho es insuficiente para garantizar la compra de todos los consumidores. A veces tenemos que hacer maromas”.
Dijo que hace algunos días vendieron un kilo de harina de maíz por persona, para ver si alcanzaba para todos.