Lo que no puede ocultarse al abrir los grifos, pretende esconderse con un clic. La Compañía Anónima Hidrológica del Centro (Hidrocentro) eliminó los registros públicos que demuestran la crisis sanitaria y ambiental más compleja de Venezuela. Desaparecieron los archivos históricos de medición de calidad del agua de su página web, denunció Lucio Herrera Gubaira, director legal de la Fundación Movimiento por la Calidad del Agua (FMPCA).
Luis Alejandro Borrero / lborrero@el-carabobeno.com / El Carabobeño
Desde 2010, luego de un extenuante proceso de peticiones públicas; e incluso una demanda en el Tribunal Supremo de Justicia; FMPCA logró que Hidrocentro comenzara la publicación mensual de parámetros de calidad. La hidrológica publicaba, pero siempre irrespetando la norma, recordó el abogado. “Publicaban seis, máximo 13 parámetros, de los 54 que Hidrocentro está obligada a dar a conocer en las Normas Sanitarias de la Calidad del Agua Potable”, vigentes desde 1999.
Los registros eran una espada de Damocles. Se notaba cómo el año pasado (2015) había sido el peor de todos en términos de calidad. Parámetros muy preocupantes, como el aluminio, habían promediado 300% por encima de la norma establecida en la gaceta oficial, recordó Herrera. Pero ahora desaparecieron totalmente del portal registros de 2015, 2014 e incluso 2013.
El único ahora disponible es enero de 2016. Allí la crisis parece haberse diluido. Color, un constante fuera de la norma durante el año pasado, ahora entró en el rango máximo aceptable de ley. Promedió 23 unidades de Platino/Cobalto cuando lo máximo permitido es 25. Así pasó con el parámetro turbiedad, cuyo valor máximo es 10 y promedió 7,9 Unidades Nefelométricas (UNT). La mejoría es notable comparado con, por ejemplo, enero de 2015, cuando la turbiedad estaba descontrolada con en 10,5 UNT. El aluminio pasó de promediar 300% por encima de la norma a 110%. En los nuevos valores todo cuadra.
El abogado intuye que debido a la preocupación social que se despertó, Hidrocentro buscaría maquillar la realidad, o al menos hacerla menos gravosa. “Por momentos en estos años pensamos que en la FMPCA arábamos en el mar. Pero ahora la gente despertó, y la presión social se siente”. Esto habría hecho que la empresa buscara cuidarse”.
El Carabobeño contactó a representantes de la hidrológica en busca de un comentario. Funcionarios prometieron devolver una llamada con la reacción oficial de la empresa, pero al cierre de esta edición no había posiciones disponibles sobre la desaparición del registro público de agua con mala calidad.